Megafusión de bancos en Alemania
Surge un nuevo gigante bancario en Alemania: el Commerzbank, el segundo del país, compró al Dresdner Bank, el cuarto, por 9.800 millones de euros.
Desde hace varios días se especulaba sobre la transacción que fue confirmada hoy públicamente. También el China Development Bank estaba interesado en adquirir al Dresdner Bank, pero la operación no llegó a concretarse, para alivio de muchos alemanes.
La venta del Dresdner Bank al Commerzbank se realizará en dos fases y quedará concluida a más tardar a fines de 2009. En un primer paso, el Commerzbank cederá a la aseguradora Allianz, actual propietaria del Dresdner Bank, la sociedad de inversiones Cominvest, valorada en unos 700 millones de euros.
Gran parte del precio de compra será pagado a Allianz luego en acciones, lo que dejará a la mayor aseguradora de Europa con una participación de casi el 30 por ciento en el nuevo Commerzbank. El precio acordado es sólo una fracción de los 24.000 millones de euros que Allianz pagara por el Dresdner Bank en el auge de la burbuja de las empresas de Internet, en 2001.
En círculos económicos, la adquisición ha sido positivamente valorada, porque surge un nuevo gran banco competitivo a nivel internacional. La cuestión ahora es si la reorganización será un éxito o no. En el primero de los casos se generarán ventajas de escala, que transformarán al Commerzbank en un verdadero rival del Deutsche Bank, el decano de la banca alemana.
Reducción de puestos de trabajo
Según lo adelantaron portavoces del Commerzbank, la fusión de los dos bancos puede llevar a la reducción de unos 9.000 puestos de trabajo de tiempo completo, ya que muchas filiales de los bancos hasta ahora rivales se hallan una junto a otra. Lo mismo sucede con numerosas áreas de actividades, que se duplicarán con la fusión.
Los puestos de trabajo serán recortados "conforme a los acuerdos colectivos de trabajo". En el extranjero se reducirán 2.500 puestos de trabajo, un 70 por ciento de los cuales corresponderán a unidades de desarrollo, control y producción, así como al sector de banca de inversión. Ambas instituciones tienen actualmente juntas un total de 67.000 empleados. De las 1.900 filiales actuales quedarán en el 2012 sólo 1.200.
Última transacción de este volumen
El presidente del sindicato Ver.di (Sindicato Unido de Servicios) y miembro del consejo de vigilancia del Commerzbank, Uwe Foullong, señaló en un comunicado: "Siempre advertimos sobre megafusiones. Lo menos que esperamos ahora de la junta directiva del Commerzbank es que configure el proceso de forma progresiva, amplia y conforme con los acuerdos colectivos de trabajo".
El sindicato, junto con los delegados de Ver.di, pondrán "todas las palancas en funcionamiento para salvar los puestos de trabajo en riesgo de ser suprimidos", añadió Foullong.
En bolsa, las primeras reacciones fueron negativas. Las acciones del Commerzbank cayeron un 6 % luego de conocerse la compra. También las acciones de Allianz perdieron valor, a pesar de que analistas alabaron a la aseguradora por deshacerse del Dresdner Bank.
La transacción es el mayor paso de los últimos años en la reestructuración del fragmentado sistema bancario de Alemania. Seguramente es la última de este volumen, ya que en el país no existen actualmente otros bancos privados de esas dimensiones.
Pablo Kummetz
fuente: www.dw-world.de
Desde hace varios días se especulaba sobre la transacción que fue confirmada hoy públicamente. También el China Development Bank estaba interesado en adquirir al Dresdner Bank, pero la operación no llegó a concretarse, para alivio de muchos alemanes.
La venta del Dresdner Bank al Commerzbank se realizará en dos fases y quedará concluida a más tardar a fines de 2009. En un primer paso, el Commerzbank cederá a la aseguradora Allianz, actual propietaria del Dresdner Bank, la sociedad de inversiones Cominvest, valorada en unos 700 millones de euros.
Gran parte del precio de compra será pagado a Allianz luego en acciones, lo que dejará a la mayor aseguradora de Europa con una participación de casi el 30 por ciento en el nuevo Commerzbank. El precio acordado es sólo una fracción de los 24.000 millones de euros que Allianz pagara por el Dresdner Bank en el auge de la burbuja de las empresas de Internet, en 2001.
En círculos económicos, la adquisición ha sido positivamente valorada, porque surge un nuevo gran banco competitivo a nivel internacional. La cuestión ahora es si la reorganización será un éxito o no. En el primero de los casos se generarán ventajas de escala, que transformarán al Commerzbank en un verdadero rival del Deutsche Bank, el decano de la banca alemana.
Reducción de puestos de trabajo
Según lo adelantaron portavoces del Commerzbank, la fusión de los dos bancos puede llevar a la reducción de unos 9.000 puestos de trabajo de tiempo completo, ya que muchas filiales de los bancos hasta ahora rivales se hallan una junto a otra. Lo mismo sucede con numerosas áreas de actividades, que se duplicarán con la fusión.
Los puestos de trabajo serán recortados "conforme a los acuerdos colectivos de trabajo". En el extranjero se reducirán 2.500 puestos de trabajo, un 70 por ciento de los cuales corresponderán a unidades de desarrollo, control y producción, así como al sector de banca de inversión. Ambas instituciones tienen actualmente juntas un total de 67.000 empleados. De las 1.900 filiales actuales quedarán en el 2012 sólo 1.200.
Última transacción de este volumen
El presidente del sindicato Ver.di (Sindicato Unido de Servicios) y miembro del consejo de vigilancia del Commerzbank, Uwe Foullong, señaló en un comunicado: "Siempre advertimos sobre megafusiones. Lo menos que esperamos ahora de la junta directiva del Commerzbank es que configure el proceso de forma progresiva, amplia y conforme con los acuerdos colectivos de trabajo".
El sindicato, junto con los delegados de Ver.di, pondrán "todas las palancas en funcionamiento para salvar los puestos de trabajo en riesgo de ser suprimidos", añadió Foullong.
En bolsa, las primeras reacciones fueron negativas. Las acciones del Commerzbank cayeron un 6 % luego de conocerse la compra. También las acciones de Allianz perdieron valor, a pesar de que analistas alabaron a la aseguradora por deshacerse del Dresdner Bank.
La transacción es el mayor paso de los últimos años en la reestructuración del fragmentado sistema bancario de Alemania. Seguramente es la última de este volumen, ya que en el país no existen actualmente otros bancos privados de esas dimensiones.
Pablo Kummetz
fuente: www.dw-world.de
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