Rescatados ilesos tres montañeros aislados en los Picos de Europa
Sotres (Cabrales), R. AJA
El Grupo de Rescate de Bomberos de Asturias trasladaba hasta el aparcamiento de Sotres, en Cabrales, a un grupo de montañeros que llevaban varios días aislados en el refugio Urriellu, en la vertiente cabraliega de los Picos de Europa.
En el operativo de salvamento participaba un helicóptero medicalizado de la entidad, si bien los excursionistas se encontraban ilesos. El Centro de Coordinación de Emergencias del 112-Asturias recibía el aviso a las 12.45 horas a través de una llamada efectuada por el guarda del refugio, quien señalaba que los excursionistas se encontraban en perfecto estado de salud y alojados en el albergue de montaña. Tras valorar la situación con los efectivos de rescate y debido a la mejoría registrada en cuanto a las condiciones climatológicas, se decidió poner en marcha el operativo de rescate valorando dos posibilidades: el traslado de los montañeros con el helicóptero hasta la localidad de Sotres, donde tenían estacionado el vehículo, o bien hacerlo hasta la localidad de Arenas de Cabrales. Finalmente, la operación de rescate culminaba en el aparcamiento de Sotres. A las 14.17 horas los tres montañeros, junto a uno de los guardas del refugio, eran trasladados a esta localidad en perfecto estado de salud. Según las mismas fuentes, dos de los montañeros afectados son de Huesca, A. N. de 30 años y O.P. de 37 años, y el tercero, U. C. de 31 años, es natural de Bilbao. Según explicaron, los tres excursionistas llevaban dos semanas practicando montañismo en esta zona de los Picos de Europa. Al parecer habían escalado una de las vías más difíciles del Picu Urriellu, la vía «Sueños de invierno», en el pilar noroeste de la roca y la ruta del Pico del Cantábrico, una de las de mayor dificultad en la zona. Pero la nieve acumulada, el intenso riesgo de aludes y las malas condiciones climatológicas, obligaron a los escaladores (profesionales) a prolongar su estancia en el refugio cinco o seis días más de lo previsto a la espera de poder descender, por sus propio pie, hasta Sotres. Como el tiempo no mejoraba y ante el miedo de que en la bajada, en esas condiciones de riesgo, se produjese algún tipo de incidente, el guarda del refugio decidió solicitar ayuda al 112-Asturias.
fuente: http://www.lne.es
El Grupo de Rescate de Bomberos de Asturias trasladaba hasta el aparcamiento de Sotres, en Cabrales, a un grupo de montañeros que llevaban varios días aislados en el refugio Urriellu, en la vertiente cabraliega de los Picos de Europa.
En el operativo de salvamento participaba un helicóptero medicalizado de la entidad, si bien los excursionistas se encontraban ilesos. El Centro de Coordinación de Emergencias del 112-Asturias recibía el aviso a las 12.45 horas a través de una llamada efectuada por el guarda del refugio, quien señalaba que los excursionistas se encontraban en perfecto estado de salud y alojados en el albergue de montaña. Tras valorar la situación con los efectivos de rescate y debido a la mejoría registrada en cuanto a las condiciones climatológicas, se decidió poner en marcha el operativo de rescate valorando dos posibilidades: el traslado de los montañeros con el helicóptero hasta la localidad de Sotres, donde tenían estacionado el vehículo, o bien hacerlo hasta la localidad de Arenas de Cabrales. Finalmente, la operación de rescate culminaba en el aparcamiento de Sotres. A las 14.17 horas los tres montañeros, junto a uno de los guardas del refugio, eran trasladados a esta localidad en perfecto estado de salud. Según las mismas fuentes, dos de los montañeros afectados son de Huesca, A. N. de 30 años y O.P. de 37 años, y el tercero, U. C. de 31 años, es natural de Bilbao. Según explicaron, los tres excursionistas llevaban dos semanas practicando montañismo en esta zona de los Picos de Europa. Al parecer habían escalado una de las vías más difíciles del Picu Urriellu, la vía «Sueños de invierno», en el pilar noroeste de la roca y la ruta del Pico del Cantábrico, una de las de mayor dificultad en la zona. Pero la nieve acumulada, el intenso riesgo de aludes y las malas condiciones climatológicas, obligaron a los escaladores (profesionales) a prolongar su estancia en el refugio cinco o seis días más de lo previsto a la espera de poder descender, por sus propio pie, hasta Sotres. Como el tiempo no mejoraba y ante el miedo de que en la bajada, en esas condiciones de riesgo, se produjese algún tipo de incidente, el guarda del refugio decidió solicitar ayuda al 112-Asturias.
fuente: http://www.lne.es
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