Iván Lomelí, joven promesa del cine mexicano, aplaudido en la Berlinale
El realizador mexicano Iván Lomelí, de 32 años, fue muy aplaudido en el Festival de cine de Berlín, que termina este sábado con la entrega del Oso de Oro a la mejor película, por su intenso cortometraje 'Buenas intenciones', la historia del linchamiento de un muchacho inocente confundido con un bandido.
Felipe, el héroe de este filme de 18 minutos, presentado en el concurso de cortometrajes de la Berlinale, se ve envuelto, por poseer un arma que no funciona, prestada por un amigo, en una serie de hechos violentos que lo llevarán a huir y a refugiarse en una iglesia. El sacerdote no lo protege y la muchedumbre lo linchará frente al templo.
'Buenas intenciones' fue el trabajo de tesis de Lomelí para graduarse de realizador en el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) de México y se inspira en varios hechos de linchamiento ocurridos en la capital mexicana.
"Hubo un caso muy sonado porque ocurrió dentro de los confines de la ciudad de México: un par de policías trabajando de forma encubierta grababan sospechosos con una cámara de video cerca de una escuela de donde habían sido secuestrados ya algunos niños. Algunos vecinos los detectan y los acusan de ser los secuestradores", explicó Lomelí en una entrevista con la AFP. "La gente los atrapó enseguida y, aunque se identificaban como oficiales de la ley, los golpearon brutalmente. Sus colegas de la policía no pudieron llegar a tiempo", añadió.
Lomelí se refirió al fenómeno de la violencia en México como tema de películas. "Yo creo que es algo que tenemos que ver con ojo crítico. Explorar el por qué y si es necesario buscar la catarsis a través del cine. La violencia no es una circunstancia, es el síntoma de una enfermedad social". dijo.
El joven realizador se refirió al buen momento que vive el cine de México. "Lo mejor que tiene el cine mexicano en este momento es que cada vez produce más. Hay nuevos nombres saliendo de entre el montón, con propuestas diferentes y cada una tiene su público", afirmó. No obstante señaló que "los egresados de las dos escuelas de cine de México se ven obligados a trabajar para la publicidad o la televisión pues aun cuando la producción de largometrajes ha aumentado, es limitada porque México no tiene una industria cinematográfica comercial".
"Yo entré a la escuela de cine inspirado por películas del 'viejo cine mexicano', como Luis Buñuel y Felipe Cazals, cineastas que trabajaban con el lado oscuro de la mente, nos hacían saber que las pesadillas también son reales, así como los sueños", explicó.
Con respecto a su futuro dijo que "a partir de la Berlinale han aparecido varias ofertas para revisar algunos argumentos de largometraje que ya tengo bajo el brazo, esperando que alguno se llegue a producir. Por supuesto, usando a la Ciudad de México y su muy particular sistema de vida como materia prima".
fuente: Agencia AFP
Felipe, el héroe de este filme de 18 minutos, presentado en el concurso de cortometrajes de la Berlinale, se ve envuelto, por poseer un arma que no funciona, prestada por un amigo, en una serie de hechos violentos que lo llevarán a huir y a refugiarse en una iglesia. El sacerdote no lo protege y la muchedumbre lo linchará frente al templo.
'Buenas intenciones' fue el trabajo de tesis de Lomelí para graduarse de realizador en el Centro de Capacitación Cinematográfica (CCC) de México y se inspira en varios hechos de linchamiento ocurridos en la capital mexicana.
"Hubo un caso muy sonado porque ocurrió dentro de los confines de la ciudad de México: un par de policías trabajando de forma encubierta grababan sospechosos con una cámara de video cerca de una escuela de donde habían sido secuestrados ya algunos niños. Algunos vecinos los detectan y los acusan de ser los secuestradores", explicó Lomelí en una entrevista con la AFP. "La gente los atrapó enseguida y, aunque se identificaban como oficiales de la ley, los golpearon brutalmente. Sus colegas de la policía no pudieron llegar a tiempo", añadió.
Lomelí se refirió al fenómeno de la violencia en México como tema de películas. "Yo creo que es algo que tenemos que ver con ojo crítico. Explorar el por qué y si es necesario buscar la catarsis a través del cine. La violencia no es una circunstancia, es el síntoma de una enfermedad social". dijo.
El joven realizador se refirió al buen momento que vive el cine de México. "Lo mejor que tiene el cine mexicano en este momento es que cada vez produce más. Hay nuevos nombres saliendo de entre el montón, con propuestas diferentes y cada una tiene su público", afirmó. No obstante señaló que "los egresados de las dos escuelas de cine de México se ven obligados a trabajar para la publicidad o la televisión pues aun cuando la producción de largometrajes ha aumentado, es limitada porque México no tiene una industria cinematográfica comercial".
"Yo entré a la escuela de cine inspirado por películas del 'viejo cine mexicano', como Luis Buñuel y Felipe Cazals, cineastas que trabajaban con el lado oscuro de la mente, nos hacían saber que las pesadillas también son reales, así como los sueños", explicó.
Con respecto a su futuro dijo que "a partir de la Berlinale han aparecido varias ofertas para revisar algunos argumentos de largometraje que ya tengo bajo el brazo, esperando que alguno se llegue a producir. Por supuesto, usando a la Ciudad de México y su muy particular sistema de vida como materia prima".
fuente: Agencia AFP
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