Ser bloguero es un oficio de riesgo en Irán, con 25 millones de internautas
NAZANIN Amirian
ANALISTA POlítica
Las caceroladas y el «pásalo» ya no son patrimonios de los españoles. El silencio de las noches de Irán bajo un Estado de sitio no declarado se rompe con el golpe de las cucharas y martillos contra cualquier artefacto metálico, y el cruce de mensajes, SMS, deja en nada el mítico tráfico de los coches en las calles abarrotadas del país durante el día.
Viejos y nuevos vehículos de comunicación se han unido para impedir que las autoridades del país aíslen a los ciudadanos y no descubran la fuerza de la unidad.
Cientos de miles de personas enlazadas a través de internet y armadas con los móviles han conseguido burlar la censura y la manipulación informativa para denunciar el fraude electoral y el golpe de Estado palaciego de Alí Jamenei, el líder de la República Islámica, y de su candidato Mahmud Ahmadineyad, a pesar de los intentos de los informáticos del régimen en interceptar y bloquear las comunicaciones.
La sociedad virtual iraní, que se coordina a través de la revista digital Fasl.e Nou (Nueva era), afirma que en los 10 años de la red de redes, los 25 millones de internautas iranís han colocado al país en el lugar 87 de entre 178 países del mundo en usar esa tecnología.
Durante el proceso electoral, el presidente Ahmadineyad fue acusado por los demás candidatos de monopolizar los medios de comunicación tradicionales, como las emisoras de radio y los 12 canales de televisión, todos estatales, por lo que a los opositores no les quedó otra solución que recurrir a lo que el equipo del presidente había menospreciado: internet y los SMS, los payamak, mensajitos en persa.
Así, el color verde de los musavistas inundó Youtube, Facebook y los blogs a pesar de que el Gobierno cortaba las comunicaciones de forma intermitente y bajaba su velocidad.
El uso de las tecnologías modernas en la República Islámica es tan peligroso que ser bloguero, por ejemplo, es un oficio de riesgo.
De hecho, la República Islámica ha sido el primer Estado del mundo en encarcelar a un bloguero. Sina Motalebi fue detenido el abril del 2003, acusado de infringir las normas islámicas.
Muerte extraña en prisión
Pero peor suerte corrió el bloguero-periodista Omid Mirsyafi. Arrestado en el marzo del 2009, «por insultar a las autoridades», fue condenado a dos años y medio de prisión, para dos meses después, en circunstancias nada claras, apareció muerto en su celda, a pesar de que Omid no era un activista político. Su página, que estaba dedicada a música y literatura, permanece abierta en su memoria y cultura.
El Parlamento islámico tiene previsto ampliar la pena de muerte a los blogueros que critiquen al régimen. Según NITLE, encargado del censo de los blogs, hay unas 86.000 bitácoras en persa.
La teocracia islámica, una de los principales enemigas de internet, presume de haber bloqueado unos cinco millones de sitios solo el año pasado, y ahora ataca los móviles, gracias a Nokia y Siemens, que les entregó la compleja tecnología que les permite monitorear, controlar y leer mensajes.
En vano. Los informáticos iranís enseguida ofrecen soluciones para saltar las barreras. Ayer, el Skype se convertía en la alternativa a la censura en la red.
La ultima ciberdisidente detenida esta semana es Shiva Nazar, una joven de 26 años, que coordinaba a través de su página las concentraciones de protesta de estos días en Teherán. Claro que ya tiene cientos de sustitutas.
FUENTE. http://www.elperiodico.com
ANALISTA POlítica
Las caceroladas y el «pásalo» ya no son patrimonios de los españoles. El silencio de las noches de Irán bajo un Estado de sitio no declarado se rompe con el golpe de las cucharas y martillos contra cualquier artefacto metálico, y el cruce de mensajes, SMS, deja en nada el mítico tráfico de los coches en las calles abarrotadas del país durante el día.
Viejos y nuevos vehículos de comunicación se han unido para impedir que las autoridades del país aíslen a los ciudadanos y no descubran la fuerza de la unidad.
Cientos de miles de personas enlazadas a través de internet y armadas con los móviles han conseguido burlar la censura y la manipulación informativa para denunciar el fraude electoral y el golpe de Estado palaciego de Alí Jamenei, el líder de la República Islámica, y de su candidato Mahmud Ahmadineyad, a pesar de los intentos de los informáticos del régimen en interceptar y bloquear las comunicaciones.
La sociedad virtual iraní, que se coordina a través de la revista digital Fasl.e Nou (Nueva era), afirma que en los 10 años de la red de redes, los 25 millones de internautas iranís han colocado al país en el lugar 87 de entre 178 países del mundo en usar esa tecnología.
Durante el proceso electoral, el presidente Ahmadineyad fue acusado por los demás candidatos de monopolizar los medios de comunicación tradicionales, como las emisoras de radio y los 12 canales de televisión, todos estatales, por lo que a los opositores no les quedó otra solución que recurrir a lo que el equipo del presidente había menospreciado: internet y los SMS, los payamak, mensajitos en persa.
Así, el color verde de los musavistas inundó Youtube, Facebook y los blogs a pesar de que el Gobierno cortaba las comunicaciones de forma intermitente y bajaba su velocidad.
El uso de las tecnologías modernas en la República Islámica es tan peligroso que ser bloguero, por ejemplo, es un oficio de riesgo.
De hecho, la República Islámica ha sido el primer Estado del mundo en encarcelar a un bloguero. Sina Motalebi fue detenido el abril del 2003, acusado de infringir las normas islámicas.
Muerte extraña en prisión
Pero peor suerte corrió el bloguero-periodista Omid Mirsyafi. Arrestado en el marzo del 2009, «por insultar a las autoridades», fue condenado a dos años y medio de prisión, para dos meses después, en circunstancias nada claras, apareció muerto en su celda, a pesar de que Omid no era un activista político. Su página, que estaba dedicada a música y literatura, permanece abierta en su memoria y cultura.
El Parlamento islámico tiene previsto ampliar la pena de muerte a los blogueros que critiquen al régimen. Según NITLE, encargado del censo de los blogs, hay unas 86.000 bitácoras en persa.
La teocracia islámica, una de los principales enemigas de internet, presume de haber bloqueado unos cinco millones de sitios solo el año pasado, y ahora ataca los móviles, gracias a Nokia y Siemens, que les entregó la compleja tecnología que les permite monitorear, controlar y leer mensajes.
En vano. Los informáticos iranís enseguida ofrecen soluciones para saltar las barreras. Ayer, el Skype se convertía en la alternativa a la censura en la red.
La ultima ciberdisidente detenida esta semana es Shiva Nazar, una joven de 26 años, que coordinaba a través de su página las concentraciones de protesta de estos días en Teherán. Claro que ya tiene cientos de sustitutas.
FUENTE. http://www.elperiodico.com
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