Edad Media: GREGORIO VII AFIRMA EL PODER DE LA IGLESIA SOBRE EL IMPERIO
Gregorio VII ejerció como pontífice entre los años 1073 y 1085, apenas asumió el pontificado quiso poner fin a la investidura civil y al predominio del poder temporal, así prohibió a Enrique IV seguir nombrando obispos en Alemania y en 1075 estableció el “Dictado Papal” documento que transcribimos a continuación y que establece perentoriamente el Predominio de la Iglesia sobre el Imperio.
El dictado papal de Gregorio VII (1075)
1. Que la Iglesia romana ha sido fundada directamente por el Señor
2. Que, en justicia, sólo el Pontífice romano puede ser llamado obispo universal
3. Que sólo el Papa puede deponer o perdonar a los obispos
4. Que su legado debe preceder a todos los obispos en un concilio, aunque sea de rango inferior
5. Que el Papa puede destituir a los ausentes
6. Que no se puede convivir en la misma casa con quienes han sido excomulgados por el Papa
7. Que sólo corresponde al Papa dictar nuevas leyes según las necesidades del tiempo, formar nuevas parroquias, transformar una canonía en abadía, dividir un obispado rico o reunir varios obispados pobres
8. Que el Papa use las insignias imperiales
9. Que los pies del Papa han de ser besados por todos los príncipes
10. Que el nombre del Papa sea invocado en todas las Iglesias
11. Que su nombre sea único en todo el mundo
12. Que le corresponde destituir a los emperadores
13. Que le corresponde transferir, en casos de necesidad , a los obispos de un obispado a otro.
14. Que le corresponde enviar a los clérigos de una iglesia a donde él quiera
15. Que un sacerdote consagrado por él debe presidir una iglesia y no estar al servicio de ella , y que no debe recibir de otro obispo un grado superior
16. Que ningún sínodo general puede ser llamado sin su autorización
17. Que ninguna disposición y ningún código de derecho sean considerados canónigos sin su aprobación
18. Que su palabra no pueda ser revocada por nadie, pero que él puede revocar las de todos los demás
19. Que él no puede ser juzgado por nadie
20. Que no debe ser condenado nadie que apele a la Santa Sede
21. Que todas las Causas Mayores ( por ejemplo, nombramiento o destitución de obispos, canonización de santos) deben ser llevadas ante él.
22. Que la Iglesia romana jamás ha errado y, según testimonio de las Sagradas Escrituras, jamás en toda la eternidad errará
23. Que el Papa romano que haya sido consagrado legítimamente, será santo por los méritos de San Pedro, como lo atestigua San Enodio, Obispo de Pavía, con quien concuerdan muchos Santos Padres, como consta en los Decretos del Santo Papa Simaco
24. Que por su decisión y con su autorización, los súbditos pueden levantar acusación
25. Que él, sin que se reúna un sínodo puede destituir a un obispo y admitir a un excomulgado nuevamente en el seno de la Iglesia
26. Que él pude desligar a los súbditos del juramento de fidelidad para con los príncipes inicuos
27. Que no sea tenido por católico quien no coincida con la Iglesia Católica
Fuente: De la Jara, Fernando; Duchens, Nancy; Frei R.T; Irene: “Antología de Documentos de Historia Universal”. CPEIP. Lo Barnechea, Santiago de Chile abril de 1991.
El dictado papal de Gregorio VII (1075)
1. Que la Iglesia romana ha sido fundada directamente por el Señor
2. Que, en justicia, sólo el Pontífice romano puede ser llamado obispo universal
3. Que sólo el Papa puede deponer o perdonar a los obispos
4. Que su legado debe preceder a todos los obispos en un concilio, aunque sea de rango inferior
5. Que el Papa puede destituir a los ausentes
6. Que no se puede convivir en la misma casa con quienes han sido excomulgados por el Papa
7. Que sólo corresponde al Papa dictar nuevas leyes según las necesidades del tiempo, formar nuevas parroquias, transformar una canonía en abadía, dividir un obispado rico o reunir varios obispados pobres
8. Que el Papa use las insignias imperiales
9. Que los pies del Papa han de ser besados por todos los príncipes
10. Que el nombre del Papa sea invocado en todas las Iglesias
11. Que su nombre sea único en todo el mundo
12. Que le corresponde destituir a los emperadores
13. Que le corresponde transferir, en casos de necesidad , a los obispos de un obispado a otro.
14. Que le corresponde enviar a los clérigos de una iglesia a donde él quiera
15. Que un sacerdote consagrado por él debe presidir una iglesia y no estar al servicio de ella , y que no debe recibir de otro obispo un grado superior
16. Que ningún sínodo general puede ser llamado sin su autorización
17. Que ninguna disposición y ningún código de derecho sean considerados canónigos sin su aprobación
18. Que su palabra no pueda ser revocada por nadie, pero que él puede revocar las de todos los demás
19. Que él no puede ser juzgado por nadie
20. Que no debe ser condenado nadie que apele a la Santa Sede
21. Que todas las Causas Mayores ( por ejemplo, nombramiento o destitución de obispos, canonización de santos) deben ser llevadas ante él.
22. Que la Iglesia romana jamás ha errado y, según testimonio de las Sagradas Escrituras, jamás en toda la eternidad errará
23. Que el Papa romano que haya sido consagrado legítimamente, será santo por los méritos de San Pedro, como lo atestigua San Enodio, Obispo de Pavía, con quien concuerdan muchos Santos Padres, como consta en los Decretos del Santo Papa Simaco
24. Que por su decisión y con su autorización, los súbditos pueden levantar acusación
25. Que él, sin que se reúna un sínodo puede destituir a un obispo y admitir a un excomulgado nuevamente en el seno de la Iglesia
26. Que él pude desligar a los súbditos del juramento de fidelidad para con los príncipes inicuos
27. Que no sea tenido por católico quien no coincida con la Iglesia Católica
Fuente: De la Jara, Fernando; Duchens, Nancy; Frei R.T; Irene: “Antología de Documentos de Historia Universal”. CPEIP. Lo Barnechea, Santiago de Chile abril de 1991.
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