Municipio de Valdivia aclara sobre bono de subsidio eléctrico 2008
Ante las declaraciones vertidas en medios de comunicación, que atribuyen cierta responsabilidad al municipio de Valdivia por el retraso en la distribución y/o otorgamiento del bono de subsidio eléctrico 2008, esta entidad se ve en el deber de aclarar a la opinión pública lo siguiente:
1.- Hace sólo un mes llegó al edificio municipal un paquete con sobres voluminosos en su interior, sin que fuesen acompañados de algún oficio, comunicación o indicación sobre su contenido o destino .
Transcurridos días sin que nadie se adjudicara su emisión, y sin que intermediara contacto de alguna repartición pública sobre ellos, como medida de seguridad se dispuso abrir para revisar el contenido, a lo que se constató que se trataría de alguna especie de documentación, presumiblemente un bono fiscal correspondiente al período 2007, y no 2008 como se ha sostenido.
Como es lógico presumir, se concluyó que debía ser documentación de alta importancia para los interesados (as), por lo que el propio alcalde instruyó hacer las pesquisas necesarias hasta identificar la fuente de origen de dicha encomienda, así como el destino que debía tener.
2.- Así, se llegó hasta el propio Ministerio de Energía, donde se reconoció que habían cometido una omisión con Valdivia al no indicar de qué se trataba, ni adjuntar la documentación necesaria para celebrar algún convenio que permitiera a esta municipalidad asumir la tarea que en derecho debía ser resuelta por la respectiva Secretaría Regional de Economía . Asimismo, se comprometieron a corregir la falta de prolijidad y a despachar la nómina de los beneficiados, que hasta ese momento tampoco se conocía.
3.- Sin embargo, y estando en conocimiento de un acuerdo marco a nivel nacional con la Asociación Chilena de Municipalidades para colaborar en la distribución de este beneficio, así como un decreto supremo que sugiere a las reparticiones responsables solicitar el apoyo de los municipios por la vía de convenios específicos en cada comuna , el alcalde instruyó iniciar los trámites administrativos y contactar a la Seremi de Economía para dar inicio a este procedimiento de la forma más expedita posible.
4.- Aunque es una pregunta de fondo, no compete al municipio pronunciarse sobre las razones por las cuales la seremi de Economía resolvió unilateralmente traspasar a la administración comunal esta tarea y no ejecutarla directamente como hubiese sido lógico, como asimismo no haber informado o consultado al respecto de forma oportuna, y en su defecto, optó por el envío de una encomienda en blanco.
Es importante hacer presente que la colaboración municipal se traduce en el desvío de recursos comunales para la contratación de servicios de correos, y la asignación de horas funcionarias, ambas no contempladas en el presupuesto 2009 para atender las necesidades de otra repartición ministerial con asiento en la misma ciudad.
La fórmula de recurrir a las municipalidades, es una recomendación en casos de lejanía entre las Seremías y los núcleos a atender, lo que obviamente no es el caso en Valdivia.
5.- Atendiendo a que se trataba de un aporte para las familias más carenciadas de la comuna; pese a las dificultades e irregularidades originadas de la falta de prolijidad de la Seremi del ramo y del ministerio de Energía; e incluso no contando con un oficio, una comunicación formal o siquiera la certeza de un convenio, esta municipalidad distribuyó gran parte de los bonos, pese a que, revisado el contenido, correspondía a un año anterior al del convenio marco.
6.- Esta corporación además se ve en el deber de advertir que tal como se ha denunciado en algunos sectores, al momento de entregar los bonos se encontró con que muchas de las familias favorecidas no contaban con energía eléctrica, requisito primario para ser elegido como beneficiario.
7.- De lo anterior, es preciso aclarar que esta municipalidad no tiene ni tuvo, ni responsabilidad, ni tuición, ni ningún tipo de participación, en el proceso de selección de los beneficiarios. No obstante, colaboró aún sin tener mandato para ello y con sus propios recursos. De lo contrario, los sobres anónimos seguirían extraviados sin referencia alguna a su contenido ni menos, a su destino.
8.- Finalmente, la corporación no sólo comparte, sino también se ha visto afectada en su imagen, por la falta de prolijidad de terceros, no obstante lo cual seguirá llana a colaborar cuanto sea posible en proyectos, iniciativas y mandatos que otorguen beneficios directos a nuestras familias valdivianas.
1.- Hace sólo un mes llegó al edificio municipal un paquete con sobres voluminosos en su interior, sin que fuesen acompañados de algún oficio, comunicación o indicación sobre su contenido o destino .
Transcurridos días sin que nadie se adjudicara su emisión, y sin que intermediara contacto de alguna repartición pública sobre ellos, como medida de seguridad se dispuso abrir para revisar el contenido, a lo que se constató que se trataría de alguna especie de documentación, presumiblemente un bono fiscal correspondiente al período 2007, y no 2008 como se ha sostenido.
Como es lógico presumir, se concluyó que debía ser documentación de alta importancia para los interesados (as), por lo que el propio alcalde instruyó hacer las pesquisas necesarias hasta identificar la fuente de origen de dicha encomienda, así como el destino que debía tener.
2.- Así, se llegó hasta el propio Ministerio de Energía, donde se reconoció que habían cometido una omisión con Valdivia al no indicar de qué se trataba, ni adjuntar la documentación necesaria para celebrar algún convenio que permitiera a esta municipalidad asumir la tarea que en derecho debía ser resuelta por la respectiva Secretaría Regional de Economía . Asimismo, se comprometieron a corregir la falta de prolijidad y a despachar la nómina de los beneficiados, que hasta ese momento tampoco se conocía.
3.- Sin embargo, y estando en conocimiento de un acuerdo marco a nivel nacional con la Asociación Chilena de Municipalidades para colaborar en la distribución de este beneficio, así como un decreto supremo que sugiere a las reparticiones responsables solicitar el apoyo de los municipios por la vía de convenios específicos en cada comuna , el alcalde instruyó iniciar los trámites administrativos y contactar a la Seremi de Economía para dar inicio a este procedimiento de la forma más expedita posible.
4.- Aunque es una pregunta de fondo, no compete al municipio pronunciarse sobre las razones por las cuales la seremi de Economía resolvió unilateralmente traspasar a la administración comunal esta tarea y no ejecutarla directamente como hubiese sido lógico, como asimismo no haber informado o consultado al respecto de forma oportuna, y en su defecto, optó por el envío de una encomienda en blanco.
Es importante hacer presente que la colaboración municipal se traduce en el desvío de recursos comunales para la contratación de servicios de correos, y la asignación de horas funcionarias, ambas no contempladas en el presupuesto 2009 para atender las necesidades de otra repartición ministerial con asiento en la misma ciudad.
La fórmula de recurrir a las municipalidades, es una recomendación en casos de lejanía entre las Seremías y los núcleos a atender, lo que obviamente no es el caso en Valdivia.
5.- Atendiendo a que se trataba de un aporte para las familias más carenciadas de la comuna; pese a las dificultades e irregularidades originadas de la falta de prolijidad de la Seremi del ramo y del ministerio de Energía; e incluso no contando con un oficio, una comunicación formal o siquiera la certeza de un convenio, esta municipalidad distribuyó gran parte de los bonos, pese a que, revisado el contenido, correspondía a un año anterior al del convenio marco.
6.- Esta corporación además se ve en el deber de advertir que tal como se ha denunciado en algunos sectores, al momento de entregar los bonos se encontró con que muchas de las familias favorecidas no contaban con energía eléctrica, requisito primario para ser elegido como beneficiario.
7.- De lo anterior, es preciso aclarar que esta municipalidad no tiene ni tuvo, ni responsabilidad, ni tuición, ni ningún tipo de participación, en el proceso de selección de los beneficiarios. No obstante, colaboró aún sin tener mandato para ello y con sus propios recursos. De lo contrario, los sobres anónimos seguirían extraviados sin referencia alguna a su contenido ni menos, a su destino.
8.- Finalmente, la corporación no sólo comparte, sino también se ha visto afectada en su imagen, por la falta de prolijidad de terceros, no obstante lo cual seguirá llana a colaborar cuanto sea posible en proyectos, iniciativas y mandatos que otorguen beneficios directos a nuestras familias valdivianas.
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