Con aprobación de partida de Educación Senado despachó proyecto de Presupuesto 2010
Por 18 votos a favor, 6 en contra y 2 abstenciones de los senadores Carlos Cantero y Víctor Pérez, el Senado ratificó el informe de la Comisión Mixta que resolvió las discrepancias surgidas entre ambas Cámaras a raíz del rechazo de la partida del Ministerio de Educación por parte de la Cámara de Diputados.
Este era el último trámite legislativo que debía cumplir el proyecto de Ley de Presupuestos para el sector público 2010, ya que previamente el informe de la Mixta había sido aprobado por la Cámara Baja. De este modo, la iniciativa sobre el erario público quedó en condiciones de ser promulgada como Ley de la República, días antes del plazo constitucional para su aprobación y que vencía el próximo lunes 30.
El debate -al igual que en otras oportunidades- fue seguido desde las tribunas por los representantes del Colegio de Profesores y no estuvo exento de polémica entre los parlamentarios partidarios de rechazar el informe de la Comisión Mixta como un llamado de atención del Ejecutivo para que acepte negociar el pago de la deuda histórica y los que apoyaban la restitución de los recursos del Ministerio de Educación.
Los senadores Baldo Prokurica, Carlos Bianchi, Roberto Muñoz Barra, Hernán Larraín, Carlos Ominami, Antonio Horvath, Adolfo Zaldívar y Alejandro Navarro criticaron la postura del Gobierno al desconocer el tema de deuda histórica que afecta al profesorado y lamentaron que se haya perdido la oportunidad de poder dialogar.
Por su parte, los senadores José García Ruminot, Juan Pablo Letelier, Camilo Escalona, Evelyn Matthei, Ricardo Núñez, Guido Girardi y Mariano Ruiz- Esquide recalcaron que las demandas del Magisterio y la calidad de educación no se resuelven por la vía indirecta de rechazar el presupuesto de Educación y se mostraron dispuestos a impulsar un acuerdo nacional que atienda los reclamos del profesorado y los desafíos en educación pública.
ARGUMENTOS
El senador Baldo Prokurica entregó una serie de antecedentes que "demuestran la existencia de la deuda histórica del Magisterio" y reprodujo una grabación donde el ministro Viera Gallo admitió este compromiso durante la tramitación del Presupuesto del año pasado. Anticipó además que "junto a los maestros vamos a ir a buscar en los tribunales internacionales la respuesta que este Congreso no dio".
A su turno, el senador Carlos Bianchi, lamentó la indiferencia de las autoridades y manifestó su preocupación por la estabilidad laboral de muchos profesores. "Los profesores necesitan irse con el compromiso del Gobierno de que es posible llegar a algún acuerdo en el futuro y que se abordará el futuro de la educación pública".
El senador José García Ruminot si bien reconoció que la deuda histórica con el Magisterio existe aclaró que el tema de fondo es: "en qué ayuda a su reconocimiento que rechacemos el 43% del Presupuesto del Ministerio de Educación". Por ello, pidió trabajar para lograr un acuerdo nacional para conseguir el mejoramiento de las remuneraciones, el reconocimiento de la deuda histórica y la evaluación docente".
En tanto, el senador Roberto Muñoz Barra, advirtió que "producto de la situación que estamos viviendo, Chile será uno de los pocos países del mundo donde la educación pública será minoritaria". Lamentó además que "la Presidenta de la República no haya terminado con la educación municipalizada y no haya influenciado las negociaciones para que existiera una mayor flexibilidad"
El senador Hernán Larraín aseguró que en este episodio "ha perdido el valor de ciertos principios y de la palabra empeñada por representantes del Gobierno que se comprometieron a abordar el tema de la deuda histórica y un año después se desdicen".
A su vez, el senador Carlos Ominami recalcó que el presupuesto de educación no está en juego, "pero sí el valor de nuestra propia palabra porque como Senado hemos reconocido la deuda histórica". Añadió que "hay una profunda inconsecuencia porque vemos una suerte de desprecio de minusvalía de la educación pública chilena y va a ser difícil recuperar la educación pública".
El senador Juan Pablo Letelier explicó "el Magisterio al igual que otros sectores sufrió muchos daños durante los años 80", pero eso no justifica el rechazo de los recursos para el Ministerio de Educación. "Tengo empatía y comprendo a los profesores pero no se avanza con esta forma de hacer política".
Por su parte, el senador Antonio Horvath agregó que "hay varias deudas históricas, como por ejemplo, el de los deudores habitacionales que han pagado hasta dos y tres veces sus viviendas". Sin embargo, aseveró que en materia de educación existen compromisos pendientes no sólo en cuanto a las remuneraciones de los profesores sino también en la situación de las zonas extremas, donde no se consideran recursos para becas y establecimientos rurales.
El senador Adolfo Zaldívar indicó que "es fundamental que nos abramos a reformular al educación pública en el país y, en ese sentido, creo que hoy se ha perdido una gran oportunidad para iniciar una diálogo con el Magisterio".
El senador Camilo Escalona rechazó los argumentos "demagógicos" utilizados en este debate porque "se está desconociendo la labor de la Presidenta Bachelet en educación. En esos años se pasó de US$4 mil millones a US$8 mil millones de inversión, se aumentó la subvención escolar, y las becas, pero hoy todo se olvida".
El senador Alejandro Navarro precisó que "aquí hay un chantaje porque el tema de fondo es político, esta es una deuda moral, no jurídica y lo que estamos discutiendo es si el Gobierno cumplió o no la palabra empeñada. Sin embargo, aquí se ha jugado con este Senado.
Discrepó de su par, la senadora Evelyn Matthei, quien enfatizó que no reconoce la deuda histórica del Magisterio, "es evidente que hay que mejorar las remuneraciones y jubilaciones pero junto con la calidad de la educación". Además, se mostró contraria a "esta forma del Congreso de recurrir al chantaje de no aprobar el presupuesto de uno u otro Ministerio cuando el Gobierno no hace lo que quiere".
En tanto, el senador Ricardo Núñez, recalcó que si bien hay que enfrentar el tema de la deuda histórica porque existen diversas interpretaciones advirtió sobre "qué vamos a hacer con miles de profesores cesantes porque tendremos menos 333 mil niños y jóvenes en los colegios municipalizados y qué vamos a hacer con las universidades estatales".
El senador Guido Girardi coincidió con sus pares en el sentido de que "hay que avanzar hacia una educación de calidad que considere la realidad de cada región, donde se pueda desarrollar una carrera docente digna y que reemplacen modelos educacionales obsoletos.
Por su parte, el senador Mariano Ruiz-Esquide recordó que existen responsabilidades compartidas en este conflicto ya que "no se pueden sentar a negociar desconociendo la existencia de la deuda y llevando a cabo un paro indefinido".
El ministro secretario general de Presidencia, José Antonio Viera Gallo, respondió a los emplazamientos de los parlamentarios que le enrostraron haber comprometido su palabra en la búsqueda de una solución a la deuda histórica y señaló que "la injusticia cometida contra los profesores se cometió durante régimen militar. Pero una cosa es reconocer una injusticia y otra es admitir una deuda jurídica".
Finalmente, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco agradeció a los legisladores la aprobación de los recursos para el Ministerio de Educación y recalcó que tanto el Gobierno como el Senado mantienen su compromiso con la educación pública y en los últimos años hemos dado pasos importantes en ese sentido.
Este era el último trámite legislativo que debía cumplir el proyecto de Ley de Presupuestos para el sector público 2010, ya que previamente el informe de la Mixta había sido aprobado por la Cámara Baja. De este modo, la iniciativa sobre el erario público quedó en condiciones de ser promulgada como Ley de la República, días antes del plazo constitucional para su aprobación y que vencía el próximo lunes 30.
El debate -al igual que en otras oportunidades- fue seguido desde las tribunas por los representantes del Colegio de Profesores y no estuvo exento de polémica entre los parlamentarios partidarios de rechazar el informe de la Comisión Mixta como un llamado de atención del Ejecutivo para que acepte negociar el pago de la deuda histórica y los que apoyaban la restitución de los recursos del Ministerio de Educación.
Los senadores Baldo Prokurica, Carlos Bianchi, Roberto Muñoz Barra, Hernán Larraín, Carlos Ominami, Antonio Horvath, Adolfo Zaldívar y Alejandro Navarro criticaron la postura del Gobierno al desconocer el tema de deuda histórica que afecta al profesorado y lamentaron que se haya perdido la oportunidad de poder dialogar.
Por su parte, los senadores José García Ruminot, Juan Pablo Letelier, Camilo Escalona, Evelyn Matthei, Ricardo Núñez, Guido Girardi y Mariano Ruiz- Esquide recalcaron que las demandas del Magisterio y la calidad de educación no se resuelven por la vía indirecta de rechazar el presupuesto de Educación y se mostraron dispuestos a impulsar un acuerdo nacional que atienda los reclamos del profesorado y los desafíos en educación pública.
ARGUMENTOS
El senador Baldo Prokurica entregó una serie de antecedentes que "demuestran la existencia de la deuda histórica del Magisterio" y reprodujo una grabación donde el ministro Viera Gallo admitió este compromiso durante la tramitación del Presupuesto del año pasado. Anticipó además que "junto a los maestros vamos a ir a buscar en los tribunales internacionales la respuesta que este Congreso no dio".
A su turno, el senador Carlos Bianchi, lamentó la indiferencia de las autoridades y manifestó su preocupación por la estabilidad laboral de muchos profesores. "Los profesores necesitan irse con el compromiso del Gobierno de que es posible llegar a algún acuerdo en el futuro y que se abordará el futuro de la educación pública".
El senador José García Ruminot si bien reconoció que la deuda histórica con el Magisterio existe aclaró que el tema de fondo es: "en qué ayuda a su reconocimiento que rechacemos el 43% del Presupuesto del Ministerio de Educación". Por ello, pidió trabajar para lograr un acuerdo nacional para conseguir el mejoramiento de las remuneraciones, el reconocimiento de la deuda histórica y la evaluación docente".
En tanto, el senador Roberto Muñoz Barra, advirtió que "producto de la situación que estamos viviendo, Chile será uno de los pocos países del mundo donde la educación pública será minoritaria". Lamentó además que "la Presidenta de la República no haya terminado con la educación municipalizada y no haya influenciado las negociaciones para que existiera una mayor flexibilidad"
El senador Hernán Larraín aseguró que en este episodio "ha perdido el valor de ciertos principios y de la palabra empeñada por representantes del Gobierno que se comprometieron a abordar el tema de la deuda histórica y un año después se desdicen".
A su vez, el senador Carlos Ominami recalcó que el presupuesto de educación no está en juego, "pero sí el valor de nuestra propia palabra porque como Senado hemos reconocido la deuda histórica". Añadió que "hay una profunda inconsecuencia porque vemos una suerte de desprecio de minusvalía de la educación pública chilena y va a ser difícil recuperar la educación pública".
El senador Juan Pablo Letelier explicó "el Magisterio al igual que otros sectores sufrió muchos daños durante los años 80", pero eso no justifica el rechazo de los recursos para el Ministerio de Educación. "Tengo empatía y comprendo a los profesores pero no se avanza con esta forma de hacer política".
Por su parte, el senador Antonio Horvath agregó que "hay varias deudas históricas, como por ejemplo, el de los deudores habitacionales que han pagado hasta dos y tres veces sus viviendas". Sin embargo, aseveró que en materia de educación existen compromisos pendientes no sólo en cuanto a las remuneraciones de los profesores sino también en la situación de las zonas extremas, donde no se consideran recursos para becas y establecimientos rurales.
El senador Adolfo Zaldívar indicó que "es fundamental que nos abramos a reformular al educación pública en el país y, en ese sentido, creo que hoy se ha perdido una gran oportunidad para iniciar una diálogo con el Magisterio".
El senador Camilo Escalona rechazó los argumentos "demagógicos" utilizados en este debate porque "se está desconociendo la labor de la Presidenta Bachelet en educación. En esos años se pasó de US$4 mil millones a US$8 mil millones de inversión, se aumentó la subvención escolar, y las becas, pero hoy todo se olvida".
El senador Alejandro Navarro precisó que "aquí hay un chantaje porque el tema de fondo es político, esta es una deuda moral, no jurídica y lo que estamos discutiendo es si el Gobierno cumplió o no la palabra empeñada. Sin embargo, aquí se ha jugado con este Senado.
Discrepó de su par, la senadora Evelyn Matthei, quien enfatizó que no reconoce la deuda histórica del Magisterio, "es evidente que hay que mejorar las remuneraciones y jubilaciones pero junto con la calidad de la educación". Además, se mostró contraria a "esta forma del Congreso de recurrir al chantaje de no aprobar el presupuesto de uno u otro Ministerio cuando el Gobierno no hace lo que quiere".
En tanto, el senador Ricardo Núñez, recalcó que si bien hay que enfrentar el tema de la deuda histórica porque existen diversas interpretaciones advirtió sobre "qué vamos a hacer con miles de profesores cesantes porque tendremos menos 333 mil niños y jóvenes en los colegios municipalizados y qué vamos a hacer con las universidades estatales".
El senador Guido Girardi coincidió con sus pares en el sentido de que "hay que avanzar hacia una educación de calidad que considere la realidad de cada región, donde se pueda desarrollar una carrera docente digna y que reemplacen modelos educacionales obsoletos.
Por su parte, el senador Mariano Ruiz-Esquide recordó que existen responsabilidades compartidas en este conflicto ya que "no se pueden sentar a negociar desconociendo la existencia de la deuda y llevando a cabo un paro indefinido".
El ministro secretario general de Presidencia, José Antonio Viera Gallo, respondió a los emplazamientos de los parlamentarios que le enrostraron haber comprometido su palabra en la búsqueda de una solución a la deuda histórica y señaló que "la injusticia cometida contra los profesores se cometió durante régimen militar. Pero una cosa es reconocer una injusticia y otra es admitir una deuda jurídica".
Finalmente, el ministro de Hacienda, Andrés Velasco agradeció a los legisladores la aprobación de los recursos para el Ministerio de Educación y recalcó que tanto el Gobierno como el Senado mantienen su compromiso con la educación pública y en los últimos años hemos dado pasos importantes en ese sentido.
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