Un peso menos de encima para Lavín. en la región de O'Higgins todos entraron a clases
El ministro de Educación Joaquín Lavín se trasladó hasta la escuela Bernardo O’Higgins, cuyas instalaciones están siendo ocupadas por el liceo Oscar Castro, para ver en terreno el normal funcionamiento de todos los colegios, lo que permitió a dicha región normalizar y tener prácticamente a todos sus alumnos en clases.
“Es un momento de satisfacción que ésta sea la primera de las regiones afectadas en que todos los alumnos volvieron a clases, y eso hay que reconocerlo”, comentó el secretario de Estado, al valorar los esfuerzos realizados para que todos los alumnos hayan iniciado su año escolar. Hoy restan siete establecimientos de Lolol y Ñuble, que en los próximos días ingresarán a clases.
El ministro Lavín, agradeció a las comunidades escolares por la disposición que han puesto para superar la crisis, al aseverar que “esto ha sido difícil. Muchos estudiantes han tenido que cambiarse de los lugares en los que estaban originalmente, han tenido que venir a otro colegio. Es un sacrificio, con cambios de horarios, con lugares diferentes, pero ustedes son un ejemplo”.
Finalmente, el ministro hizo un llamado a la generosidad en otras regiones, ante la negativa de algunos colegios de facilitar sus instalaciones para alumnos damnificados. Al respecto comentó que “les quiero pedir un gesto de generosidad. La única manera de que todos los niños de Chile salven el año y entren a clases es haciendo sacrificios y, en ese sentido, destaco el ejemplo de Rancagua
“Es un momento de satisfacción que ésta sea la primera de las regiones afectadas en que todos los alumnos volvieron a clases, y eso hay que reconocerlo”, comentó el secretario de Estado, al valorar los esfuerzos realizados para que todos los alumnos hayan iniciado su año escolar. Hoy restan siete establecimientos de Lolol y Ñuble, que en los próximos días ingresarán a clases.
El ministro Lavín, agradeció a las comunidades escolares por la disposición que han puesto para superar la crisis, al aseverar que “esto ha sido difícil. Muchos estudiantes han tenido que cambiarse de los lugares en los que estaban originalmente, han tenido que venir a otro colegio. Es un sacrificio, con cambios de horarios, con lugares diferentes, pero ustedes son un ejemplo”.
Finalmente, el ministro hizo un llamado a la generosidad en otras regiones, ante la negativa de algunos colegios de facilitar sus instalaciones para alumnos damnificados. Al respecto comentó que “les quiero pedir un gesto de generosidad. La única manera de que todos los niños de Chile salven el año y entren a clases es haciendo sacrificios y, en ese sentido, destaco el ejemplo de Rancagua
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