Diputado Sauerbaum se reunió con Ministro de Agricultura para solicitar compromiso con la finalización del proyecto Laja-Diguillín
Publicado el 08 de diciembre del 2010
“Estamos muy satisfechos y esperanzados con la respuesta que nos ha dado el Ministro José Antonio Galilea” señaló el diputado por Ñuble, Frank Sauerbaum, tras reunirse este lunes con la autoridad del sector para solicitarle su apoyo irrestricto con la finalización de las obras del canal de regadío Laja-Diguillín.
La cita contó además, con la participación del diputado Rosauro Martínez y con los miembros de los llamados “Blancos de Bulnes” y los regantes de San Ignacio y Bulnes.
“Hemos escuchado del ministro su compromiso de concluir las obras del canal Laja- Diguilín, tal como se planeó inicialmente, eso significa que van a terminar de construir los canales de regadío que faltan y que el gobierno de la Concertación dejó inconclusos”, señaló Sauerbaum.
Por otra parte indicó que “otro de los temas que se vieron, es que hoy día existe la posibilidad de que esta obra y su administración, se traspase a los regantes con la condición de que culmine, lo que es una excelente noticia para los pequeños agricultores ya que disminuirán los costos de abastecimiento de agua para ellos”.
Además el legislador agregó que “a partir del viernes 17 de este mes, se comenzarán a reunir los abogados del Ministerio de Agricultura con los miembros de los regantes de Bulnes y San Ignacio, para discutir un tema que también es importante y que son los certificados de suministro, los que permitirán el uso de aguas hasta el 2021 cuando se traspasen definitivamente los derechos de agua a los pequeños regantes”.
Finalmente el diputado por el distrito 42 recalcó que “nosotros creemos que en el año 2012 tendremos los recursos para terminar esta obra, la que ha tenido un costo mucho mayor al que inicialmente estaba pensado, partió con un presupuesto de 100 millones de dólares ya va en los 220 millones. El problema fundamental que tiene este proyecto es que no ha cumplido su objetivo, ya que ha terminado dándole agua a los agricultores que ya tenían, y el objetivo fundamental de este tipo de obras de regadío, financiados por el Estado, es mejorar la calidad de vida de los que no tienen agua, pequeños agricultores que tienen menos de 10 hectáreas y que tienen agricultura de subsistencia”.
“Estamos muy satisfechos y esperanzados con la respuesta que nos ha dado el Ministro José Antonio Galilea” señaló el diputado por Ñuble, Frank Sauerbaum, tras reunirse este lunes con la autoridad del sector para solicitarle su apoyo irrestricto con la finalización de las obras del canal de regadío Laja-Diguillín.
La cita contó además, con la participación del diputado Rosauro Martínez y con los miembros de los llamados “Blancos de Bulnes” y los regantes de San Ignacio y Bulnes.
“Hemos escuchado del ministro su compromiso de concluir las obras del canal Laja- Diguilín, tal como se planeó inicialmente, eso significa que van a terminar de construir los canales de regadío que faltan y que el gobierno de la Concertación dejó inconclusos”, señaló Sauerbaum.
Por otra parte indicó que “otro de los temas que se vieron, es que hoy día existe la posibilidad de que esta obra y su administración, se traspase a los regantes con la condición de que culmine, lo que es una excelente noticia para los pequeños agricultores ya que disminuirán los costos de abastecimiento de agua para ellos”.
Además el legislador agregó que “a partir del viernes 17 de este mes, se comenzarán a reunir los abogados del Ministerio de Agricultura con los miembros de los regantes de Bulnes y San Ignacio, para discutir un tema que también es importante y que son los certificados de suministro, los que permitirán el uso de aguas hasta el 2021 cuando se traspasen definitivamente los derechos de agua a los pequeños regantes”.
Finalmente el diputado por el distrito 42 recalcó que “nosotros creemos que en el año 2012 tendremos los recursos para terminar esta obra, la que ha tenido un costo mucho mayor al que inicialmente estaba pensado, partió con un presupuesto de 100 millones de dólares ya va en los 220 millones. El problema fundamental que tiene este proyecto es que no ha cumplido su objetivo, ya que ha terminado dándole agua a los agricultores que ya tenían, y el objetivo fundamental de este tipo de obras de regadío, financiados por el Estado, es mejorar la calidad de vida de los que no tienen agua, pequeños agricultores que tienen menos de 10 hectáreas y que tienen agricultura de subsistencia”.
Comentarios