MINISTRO HUGO DOLMESTCH ASISTE A XL CONVENCIÓN DE LA ASOCIACIÓN NACIONAL DE MAGISTRADOS 2012

Con una ceremonia realizada en el salón plenario de la Corte de Apelaciones de Talca se dio inició, el jueves 11 de octubre, a la “XL Convención de la Asociación Nacional de Magistrados”, asamblea que, anualmente, reúne a los jueces del país para abordar diversos temas de interés gremial y de la judicatura.







A la ceremonia asistió -en representación del presidente de la Corte Suprema, Rubén Ballesteros Cárcamo- el ministro Hugo Dolmestch Urra; el ministro de Justicia, Tedoro Ribera; el presidente de la Asociación Nacional de Magistrados, Leopoldo Llanos Sagristá; la presidenta de la Corte de Apelaciones de Talca, Juana Venegas; y el presidente de la Asociación Regional de Magistrados del Maule, Gerardo Bernales.







El ministro Dolmestch destacó la labor gremial que realiza la Asociación Nacional de Magistrados y valoró el trabajo de cada uno de los jueces que se desempeñan en los distintos ámbitos del Poder Judicial. Asimismo, anunció que el máximo tribunal y la Corporación Administrativa continuarán dando apoyo en proyectos como el programa de Fortalecimiento Institucional del BID y la Reforma Procesal Civil.







“Contamos con jueces muy bien preparados en todas las competencias, preparación que se entrega y adquiere permanentemente a través de la Academia Judicial, de otros tantos organismos académicos internos y externos y del ejercicio comprometido de la jurisdicción. El profesionalismo de los jueces será siempre la mejor garantía de un buen trabajo. Confiamos en el criterio de nuestros magistrados, en su formación y en la labor que realizan con minuciosidad y con apego a la ley. Las resoluciones judiciales, por cierto, están sujetas a un permanente análisis y discusión tanto académica, de abogados y de la opinión pública en general, pero su revisión sólo está entregada a los tribunales superiores mediante la interposición de los recursos que establece la ley”, señaló en su alocución.







Al concluir el acto, fue consultado por los medios de comunicación regional acerca de la necesidad o no de reformar el Código Procesal Penal. Al respecto, señaló que “hay algunas cosas que se podrían hacer, pero pienso -en lo personal- que lo fundamental de todo este asunto es un problema cultural. Nos cuesta entender, y a la comunidad más aún, por qué se anulan los procesos, por qué fracasan las investigaciones. Antes, un solo juez los metía presos a todos, pero ahora cuesta entender el sistema y cuesta entender los resultados, porque si uno va a las cárceles están llenas. Todo el mundo critica que somos muy liberales, que la puerta giratoria y usted va a las cárceles y están más llenas que nunca”.