Empresa incubada en la décima región está exponiendo en Milán

La empresa Demodé de Bernardita Marambio, está participando en el Salone Internazionale del Mobile de Milán, con sus paneles desarrollados a partir de residuos textiles, los que  se aglomeran con un adhesivo 100% biodegradable a base de almidón, que le otorga resistencia estructural.

Demodé es una empresa incubada con Capital Semilla de Corfo a través de la Incubadora de Negocios de la Universidad de Los Lagos, que busca solucionar el alto porcentaje de residuos textiles que terminan en vertederos, provenientes de la industria textil chilena, centrada principalmente en la comuna de Recoleta en Santiago de Chile (sólo en esta ciudad se registran cerca de 46 mil toneladas de este tipo de residuo al año).

En Milán, Demodé está presente en el stand de Ventura Warehouse, salón alternativo holandés que reúne diseñadores de todo el mundo, y en el de la librería de materiales Materia Connexion. Bernardita señala que “poder venir a Milán a mostrar mi trabajo y mi proyecto es una oportunidad increíble a nivel personal y profesional. El compartir con otros diseñadores, ver como concretan sus ideas y escuchar sus opiniones hace un cambio importante en la manera que tengo de trabajar, el perder el miedo de atreverse a experimentar más allá. El paso profesional de mostrar mi trabajo, generar una red de contactos, publicar en diferentes medios importantes es un gran comienzo para mi emprendimiento”.

Demodé busca ser un producto certificado como aporte al cuidado del medio ambiente y aporte a la sociedad, desde su cadena productiva hasta el fin de su vida útil. Puede ser aplicado como revestimiento decorativo de muros interiores, diseño de objetos y accesorios, aplicación en mobiliario y está disponible para ser parte de diversos proyectos, gracias a que puede ser mecanizado fácilmente (corte con sierra, perforado, lijado, atornillado, encolado y adherido a otros materiales, etc.).

El Capital Semilla de Corfo le permitirá consolidarse como una empresa sostenible en el tiempo, conseguir en una primera fase la puesta en marcha de la empresa validando además el producto en el mercado. Luego en una segunda etapa de despegue comercial lograr las ventas estimadas y posicionamiento del producto tanto a nivel nacional como internacional.