El
jueves 13 de marzo, se efectuó en la Escuela de Aviación
la ceremonia en la que 135 Cadetes de primer año vistieron por
primera vez el uniforme azul aéreo que los identificará
como miembros del Instituto formador de los Oficiales de la Fuerza Aérea
de Chile por los próximos cuatro años.
Luego de un riguroso periodo de instrucción militar básica,
que se extendió por más de un mes en la Base Aérea
“Maquehue” en la ciudad de Temuco, los nuevos Cadetes de
aviación efectuaron ante las autoridades presentes y sus familias
el compromiso más importante en la carrera de todo militar, el
Juramento a la Bandera.
En la actividad, que fue presidida por el Comandante del Comando de
Personal, General de Aviación Leopoldo Moya Navarro, los Cadetes
recibieron los certificados que los acreditan como integrantes de la
Escuela de Aviación.
El Comandante del Grupo Escuela, Comandante de Grupo (DA) Claudio Alcázar,
destacó en su discurso que “el camino no fue fácil,
el paso de la comodidad y el calor de hogar junto a la familia se vio
abruptamente interrumpido por un vuelo militar hacia la zona de la Araucanía
en la histórica Base Maquehue, junto a un grupo de jóvenes
con los que sólo compartían el anhelo puro y sublime de
vocación de servicio y amor a la Patria.
De esta forma, un duro proceso sistemático y progresivo, permitió
que este grupo de jóvenes exaltara los más nobles sentimientos
de coraje, valor y camaradería para transformarse en una bandada,
la bandada “Toqui” nombre de espíritu guerrero propuesto
por ellos mismos en alusión al retorno de las actividades operativas
de la Fuerza Aérea de Chile en esa zona de tradición guerrera
depositaria de un legado histórico.
Al igual que ellos, estos jóvenes soñadores se atrevieron
a iniciar la concreción de sus sueños y ganaron esta pequeña
etapa, que representa el inicio de la carrera, el comienzo de un camino
de vocación y servicio a la Patria, en la que debieron poner
a prueba su temple y fortaleza, tanto física como mental, para
sobrellevar el ritmo que la vida militar trae asociado.
Una vez concluida la ceremonia, los cadetes se dirigieron formados al
sector de la losa de operaciones donde tuvieron un emotivo reencuentro
con sus familias y amigos que los esperaban para su primer fin de semana
de salida como integrantes de la Escuela de Aviación.
Acompañados por los orgullosos padres, amigos y familiares, los
Cadetes revivieron emocionados las anécdotas de este primer paso
de lo que será una carrera al servicio de la Patria como Oficiales
de la Fuerza Aérea de Chile.
Ingreso por el Pórtico Antiguo
Ese mismo día jueves, con los primeros rayos del Sol, y mientras
la banda interpretaba el himno de la Escuela de Aviación, los
Cadetes de la Primera Bandada realizaron una de las actividades más
tradicionales del día de su investidura, el ingreso por el Pórtico
Histórico.
Esta centenaria estructura por la que han ingresado todas las promociones
de Cadetes tiene impresas en letras de bronce los principios de Honor,
Lealtad, Patria y Fuerza Aérea, y es abierta sólo en ocasiones
especiales para dar la bienvenida a los nuevos Cadetes que se incorporan
a esta Alma Mater.
Al interior se encuentran todos los Oficiales y Cadetes del Instituto,
que los esperan formados, simbolizando la fraternidad y los más
profundos valores de camaradería que por más de cien años
han caracterizado a los aviadores chilenos.
A través de esta sencilla ceremonia, la Escuela dio la bienvenida
a sus miembros más jóvenes. /rng
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