GRAN APORTE DE LA FACH A LOS DAMNIFICADOS POR EL INCENDIO EN VALPARAÍSO
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El
sábado 12 de abril la ciudad de Valparaíso fue víctima
de uno de los incendios más devastadores que se han registrado
en la historia de Chile. Ese día, tres mil casas construidas
en once cerros de la ciudad puerto fueron totalmente arrasadas por la
fuerza de las llamas, dejando un total de 12 mil personas damnificadas,
15 víctimas fatales y cerca de mil hectáreas quemadas
por el fuego.
Una verdadera catástrofe nacional cuya magnitud movilizó a todos los estamentos comprometidos, entre ellos a la Fuerza Aérea de Chile, que la madrugada de ese día se trasladó hasta la zona afectada con una Unidad de Oficiales y Personal del Cuadro Permanente del Regimiento de Artillería Antiaérea y Fuerzas Especiales “Escuela Táctica” de Quintero, que se desplegó hacia los cerros de Valparaíso afectados por el incendio con la finalidad de apoyar la emergencia. Su experiencia en el terremoto y posterior tsunami que azotó al sur de Chile en el 2010, además de su participación en la misión humanitaria en Haití fue primordial para contar con su apoyo. Fue así que tras declararse zona de catástrofe, los efectivos institucionales se instalaron en el cerro La Cruz, tomando el control de la seguridad interna y la mantención del orden público del sector. Son en total 30 efectivos que desde ese día, en turnos de 24 horas, se encuentran trabajando en el lugar. “En esos turnos lo que hacemos principalmente es patrullaje y dirigir el tránsito en el cerro, ya que por la cantidad de voluntarios que han venido se produce mucho atochamiento lo que puede derivar en un descontrol y posterior accidente”, explica el Teniente (DA) Francisco Miqueles, de dotación del Grupo de FF.EE. del Regimiento de Quintero, agregando que en la noche, su tarea consiste principalmente en resguardar los sectores con menor luminosidad y brindar apoyo a las personas que están en condición de calle. “Verificar si se encuentran en buenas condiciones o si requieren algún tipo de coordinación con otra organización”, recalca. “Desde que hemos estado acá no hemos tenido ningún problema, ni robos, ni peleas, todo sin novedad”, cuenta, especificando que están a cargo de la seguridad de 185 familias más una población flotante que llega a las 10 mil personas. “Ha sido una buena experiencia, en el sentido de poder ayudar a la gente y darle la seguridad que ellas esperan después de haberlo perdido todo”, señala. Una misión que seguramente no olvidarán, principalmente por las múltiples muestras de agradecimiento de parte de la gente. “Si desde que llegamos nos ofrecen de todo, agua, comida, alojamiento. Es muy enriquecedor sentir ese acercamiento con la ciudadanía”, manifestó. Como en casa Un valioso apoyo que se sumó a los nueve albergues distribuidos en la ciudad de Valparaíso, los que en la actualidad cobijan a más de mil afectados, contextualizados en 260 familias. Se trata de la Escuela Alemania, Escuela Grecia, Estadio O´Higgins, Iglesia Juan Bosco, Escuela Gaspar Cabrales, Liceo Técnico Francia, Centro Cultural Trafón, Gimnasio de la Armada y Centro Cultural Las Cañas, que cuentan, cada uno, con el apoyo de ocho efectivos de la Fuerza Aérea de Chile: un Oficial, un personal femenino y seis Personal del Cuadro Permanente, de las Guarniciones Aéreas de El Bosque, Pudahuel y Cerrillos que tienen la misión de brindar la seguridad y apoyo a cada establecimiento. Según explica el Jefe de la Agrupación, Coronel de Aviación (DA) Humberto Capino, “desde el día lunes nos pusimos de acuerdo con diversos estamentos del Estado como el municipio de Valparaíso, Secretarios Regionales Ministeriales, la Policía de Investigaciones, Carabineros de Chile, Cruz Roja y Defensa Civil, entre otros, para coordinar los diferentes procedimientos a seguir. De ahí ha pasado una semana y hemos visto que ha funcionado”, comentó. Cuenta que su misión principal es mantener la seguridad tanto interna como externa de los albergues y, al mismo tiempo, apoyar la labor de quienes llevan el control del establecimiento. En este sentido, señala que la idea es traspasar los conocimientos y experiencia como Fuerza Aérea para llevar adelante acciones que tienen directa relación con las personas como ser humano. “Nuestra misión más que nada es trabajar desde el punto de vista humanitario y todo lo que tiene que ver con el derecho de las personas, con su cuidado, que la prensa no invada su espacio, coordinar las visitas. Estar claros que su pieza es su casa y a ellos se les tiene que pedir permiso para ingresar”, explica, junto con enfatizar que también es importante la labor de registro. “Acá no puede ingresar cualquier persona. Se hace un estudio de cada uno de ellos con apoyo de otros estamentos. La idea es convertir este espacio en un lugar de contención, digno, en donde las personas se sientan con la tranquilidad de estar en un lugar protegido y bien organizado”, puntualizó. |
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Fuente: Fuerza Aérea de Chile, http://www.fach.cl/noti_abril14.htm
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