Senado: Avanzan en estudio de proyecto que establece penas para quienes conduzcan en estado de ebriedad. Nueva iniciativa presentada por un grupo de parlamentarios busca modificar la extensión de las penas ante lesiones graves a terceros.
Senado: Avanzan en estudio de proyecto que establece penas para quienes conduzcan en estado de ebriedad.
Nueva iniciativa presentada por un grupo de
parlamentarios busca modificar la extensión de las penas ante lesiones
graves a terceros.
Publicado el: 24/04/2014
Un
pormenorizado análisis al proyecto que modifica la Ley de Tránsito para
la sanción a los conductores que manejen en estado de ebriedad y causen
lesiones graves con resultado de muerte realizó la Comisión de
Constitución, Legislación, Justicia y Reglamento, junto a una serie de
abogados penalistas en su última sesión.Cabe indicar que esta iniciativa surge luego que el informe de la Comisión Mixta sobre el proyecto de conducción en estado de ebriedad,- denominado “Ley Emilia”-, (Boletín 8813-15) no lograra convertirse en ley, tras su rechazo en la Cámara Baja.
Según establece la Constitución, si los informes de Comisión Mixta no tienen la aprobación de ambas Cámaras, no hay ley. (Ver nota relacionada)
En el marco de este debate surgió este nuevo proyecto que tuvo su origen en una moción de los senadores Alberto Espina, Felipe Harboe, Hernán Larraín, Patricio Walker y Andrés Zaldívar y que apunta a modificar el artículo 196 de la ley de Tránsito, -donde se especifican las sanciones para quienes conduzca bajo la influencia del alcohol-.
Para el presidente de la Comisión, el senador Felipe Harboe, este proyecto tiene como finalidad, “modificar las penas que actualmente se imponen a delitos de lesiones graves o gravísimas que fluctúan entre 10 a 15 años, y que al final, en lo concreto, al dictar sentencia eran rebajadas por los jueces”.
“Con este proyecto se busca que las penas sean más racionales, (entre tres y seis años) y que el juez al disponer de este menor tiempo de castigo no pueda rebajar la sentencia, confiriendo con ello un sentido de racionalidad y coherencia al sistema legal”, puntualizó el parlamentario.
Agregó el senador Harboe que, “no podemos permitir que las personas que se encuentra en estado de ebriedad y se ponen a un volante a manejar causen lesiones o la muerte y terminen con una escasa penalidad porque eso genera una sensación de impunidad que no es aceptado cuando el bien jurídico protegido es la vida”.
DEFICIENCIAS
Por su parte, el senador Alberto Espina, observó que la instancia se abocó a, “resolver las insuficiencias que tiene nuestra legislación respecto a los delitos de conducción en estado de ebriedad y que tiene como resultado la muerte, y donde el Estado tiene el deber de proteger a la ciudadanía”.
Agregó que en la Comisión, también se estudiaron varias situaciones, “como cuando existen agravantes que pueden surgir en diferentes delitos, o cuando la persona se arranca del lugar del hecho dejando abandonado al herido, cuando es reincidente de un delito o cuando es un chofer profesional y supuestamente tiene las condiciones para auxiliar a una persona atropellada”, indicó finalmente el legislador.
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