Diputados piden al Ejecutivo que ingrese a trámite legislativo una nueva Ley de Migración
Diputados piden al Ejecutivo que ingrese a trámite legislativo una nueva Ley de Migración
Publicado el 04 de agosto del 2017
Los legisladores remarcaron que este es un tema humanitario que Chile no puede seguir ignorando y que debe ser enfrentado por la autoridad, en especial, por la precariedad social y laboral en la que se encuentran muchas de estas personas, particularmente aquellos que permanecen en nuestro país en forma irregular.
Por 87 votos a favor, diez en contra y seis abstenciones, la Sala de la Cámara de Diputados aprobó la resolución 898 por medio de la cual se solicita a la Presidenta de la República disponer la pronta tramitación de un proyecto de ley que establezca una nueva ley de migración.
La propuesta, aprobada el pasado 1 de agosto, fue planteada a la Sala por los diputados DC Claudio Arriagada, Yasna Provoste, Marcelo Chávez, Aldo Cornejo, Iván Flores, Roberto León, Pablo Lorenzini, Juan Enrique Morano y Sergio Ojeda y el independiente Sergio Espejo.
Los legisladores recordaron que la Ley de Extranjería data de 1975, en tanto que la regulación que aborda situaciones como el ingreso al país, la residencia, permanencia definitiva, egreso, expulsión y control de extranjeros proviene del Decreto Ley 1.094.
“Esta norma, dictada en plena dictadura militar, tiene un sesgo marcado en la seguridad nacional y en la excesiva intervención policial. Establece un sistema institucional engorroso que entorpece, desde lo administrativo, el libre tránsito de las personas en un contexto en que los flujos migratorios son mayores”, plantean lo autores en la resolución.
Indicaron que, según cifras del INE (datos preliminares del censo 2012), los inmigrantes ya representan el 2% del total de la población de nuestro país. Especificaron que un 15% de ellos se dedica a labores domésticas; un 7% se emplea en negocios del rubro de ventas en tiendas y almacenes; y un 3% trabaja como peones o jornaleros en la construcción.
Los parlamentarios remarcaron que los antecedentes disponibles muestran que, en ningún caso, se puede señalar que en Chile haya un exceso de inmigrantes, ya que, en comparación con otros países de la OCDE, la proporción de ellos en el total de la población es baja.
Asimismo, observaron que, conforme a información de la Policía de Investigaciones, alrededor de un 25% del total de inmigrantes en Chile se encuentra en situación irregular, cifra alta comparada con otros países. Esto trae aparejado que quienes se encuentran en dicha situación, acotan en el texto, “no puedan encontrar un trabajo bajo contrato formal ni puedan acceder a los beneficios del Estado, como lo son el ingresar al Sistema de Protección Social, cotizar en salud o para pensionarse”.
“Este es un tema humanitario que Chile no puede seguir ignorando. Son miles las personas que esperan una respuesta, una política clara para poder regularizar su situación, incluyendo niños y familias que han abandonado sus países de origen en busca de una mejor calidad de vida en nuestro país, enfrentando, muchas veces, precarias situaciones laborales, abusos y una fragilidad que no podemos seguir invisibilizando”, puntualizaron.
Publicado el 04 de agosto del 2017
Los legisladores remarcaron que este es un tema humanitario que Chile no puede seguir ignorando y que debe ser enfrentado por la autoridad, en especial, por la precariedad social y laboral en la que se encuentran muchas de estas personas, particularmente aquellos que permanecen en nuestro país en forma irregular.
Por 87 votos a favor, diez en contra y seis abstenciones, la Sala de la Cámara de Diputados aprobó la resolución 898 por medio de la cual se solicita a la Presidenta de la República disponer la pronta tramitación de un proyecto de ley que establezca una nueva ley de migración.
La propuesta, aprobada el pasado 1 de agosto, fue planteada a la Sala por los diputados DC Claudio Arriagada, Yasna Provoste, Marcelo Chávez, Aldo Cornejo, Iván Flores, Roberto León, Pablo Lorenzini, Juan Enrique Morano y Sergio Ojeda y el independiente Sergio Espejo.
Los legisladores recordaron que la Ley de Extranjería data de 1975, en tanto que la regulación que aborda situaciones como el ingreso al país, la residencia, permanencia definitiva, egreso, expulsión y control de extranjeros proviene del Decreto Ley 1.094.
“Esta norma, dictada en plena dictadura militar, tiene un sesgo marcado en la seguridad nacional y en la excesiva intervención policial. Establece un sistema institucional engorroso que entorpece, desde lo administrativo, el libre tránsito de las personas en un contexto en que los flujos migratorios son mayores”, plantean lo autores en la resolución.
Indicaron que, según cifras del INE (datos preliminares del censo 2012), los inmigrantes ya representan el 2% del total de la población de nuestro país. Especificaron que un 15% de ellos se dedica a labores domésticas; un 7% se emplea en negocios del rubro de ventas en tiendas y almacenes; y un 3% trabaja como peones o jornaleros en la construcción.
Los parlamentarios remarcaron que los antecedentes disponibles muestran que, en ningún caso, se puede señalar que en Chile haya un exceso de inmigrantes, ya que, en comparación con otros países de la OCDE, la proporción de ellos en el total de la población es baja.
Asimismo, observaron que, conforme a información de la Policía de Investigaciones, alrededor de un 25% del total de inmigrantes en Chile se encuentra en situación irregular, cifra alta comparada con otros países. Esto trae aparejado que quienes se encuentran en dicha situación, acotan en el texto, “no puedan encontrar un trabajo bajo contrato formal ni puedan acceder a los beneficios del Estado, como lo son el ingresar al Sistema de Protección Social, cotizar en salud o para pensionarse”.
“Este es un tema humanitario que Chile no puede seguir ignorando. Son miles las personas que esperan una respuesta, una política clara para poder regularizar su situación, incluyendo niños y familias que han abandonado sus países de origen en busca de una mejor calidad de vida en nuestro país, enfrentando, muchas veces, precarias situaciones laborales, abusos y una fragilidad que no podemos seguir invisibilizando”, puntualizaron.
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