Batallón Chile celebra navidad solidaria junto a 400 niños haitianos
Unos 400 niños menores de 14 años, en su gran mayoría huérfanos, fueron invitados personalmente por efectivos del Batallón Chile a celebrar la Navidad al Cuartel "Carrera", en CapHaitien. El objetivo de la actividad fue darles un día especial a cada uno de los niños asistentes, quienes no tienen la oportunidad de recibir un regalo para las fiestas de fin de año.
Los pequeños invitados son menores que viven en las cercanías del Cuartel, otros, de la Fundación Valdoco, que trabaja en el cuidado de niños huérfanos, y los hijos del personal local que trabaja en el Batallón.
La jornada se inició a las 10 de la mañana con la llegada los niños. Fueron recibidos por personal de los Cuarteles O'Higgins y Prat, quienes los agruparon con diferentes símbolos infantiles para realizar actividades recreativas por grupos.
Carreras en saco, fútbol, elevar el volantín y pintar, fueron algunas de las entretenciones que los menores realizaron bajo la supervisión de los efectivos chilenos que cumplen servicio para la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH).
Luego de compartir con Papá Noel, los niños disfrutaron de sus juguetes nuevos junto a los efectivos nacionales.
Posterior a eso, se les invitó al patio techado de la Unidad donde la emoción invadió a los pequeños con la sorpresiva llegada de Santa Claus y dos de sus duendes, quienes entregaron un regalo a cada uno de los niños presentes. Papá Noel y sus ayudantes fueron representados por el Sargento 1° Pablo Vera, Cabo 1° Carlos Castro, y el Soldado Profesional Daniel Bustos.
Los 400 niños fueron pasando uno a uno por el escenario desplegado para la ocasión, recibiendo un regalo de manos de Santa Claus. Cada presente, entregado, entre ellos pelotas, peluches, muñecas y juguetes, fueron donados personalmente por cada soldado chileno desplegado en Haití.
Cerca del mediodía, los pequeños recibieron una colación preparada por el Batallón Chile, terminando así una jornada llena de felicidad para los niños, y una gran emoción en los militares chilenos que celebrarán esta Navidad de manera muy particular. Estarán lejos de sus familias, de sus seres queridos, pero con el orgullo del deber cumplido y de hacer feliz a los niños haitianos, que tanto lo necesitan.
Los pequeños invitados son menores que viven en las cercanías del Cuartel, otros, de la Fundación Valdoco, que trabaja en el cuidado de niños huérfanos, y los hijos del personal local que trabaja en el Batallón.
La jornada se inició a las 10 de la mañana con la llegada los niños. Fueron recibidos por personal de los Cuarteles O'Higgins y Prat, quienes los agruparon con diferentes símbolos infantiles para realizar actividades recreativas por grupos.
Carreras en saco, fútbol, elevar el volantín y pintar, fueron algunas de las entretenciones que los menores realizaron bajo la supervisión de los efectivos chilenos que cumplen servicio para la Misión de Naciones Unidas para la Estabilización de Haití (MINUSTAH).
Luego de compartir con Papá Noel, los niños disfrutaron de sus juguetes nuevos junto a los efectivos nacionales.
Posterior a eso, se les invitó al patio techado de la Unidad donde la emoción invadió a los pequeños con la sorpresiva llegada de Santa Claus y dos de sus duendes, quienes entregaron un regalo a cada uno de los niños presentes. Papá Noel y sus ayudantes fueron representados por el Sargento 1° Pablo Vera, Cabo 1° Carlos Castro, y el Soldado Profesional Daniel Bustos.
Los 400 niños fueron pasando uno a uno por el escenario desplegado para la ocasión, recibiendo un regalo de manos de Santa Claus. Cada presente, entregado, entre ellos pelotas, peluches, muñecas y juguetes, fueron donados personalmente por cada soldado chileno desplegado en Haití.
Cerca del mediodía, los pequeños recibieron una colación preparada por el Batallón Chile, terminando así una jornada llena de felicidad para los niños, y una gran emoción en los militares chilenos que celebrarán esta Navidad de manera muy particular. Estarán lejos de sus familias, de sus seres queridos, pero con el orgullo del deber cumplido y de hacer feliz a los niños haitianos, que tanto lo necesitan.
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