Remplazar el Aporte Fiscal Indirecto (AFI) por un fondo pro equidad. Esa fue la propuesta que llevó el ministro de Educación, Harald Beyer, hasta el pleno del Consejo de Rectores, donde señaló que a mediados de este año enviará un proyecto de ley que transforme la manera de asignar este fondo.
Ministro Beyer se reúne con rectores y propone remplazar el Aporte Fiscal Indirecto por un fondo pro equidad
La iniciativa implica redestinar recursos por $ 23.153 millones que se entregan hoy a las instituciones que reciben a los 27.500 estudiantes con mejores puntaje PSU
“Les he planteado que nosotros como Ministerio de Educación vamos a enviar un proyecto a mediados de año que remplace el AFI, que es una asignación que se entrega a las instituciones por los estudiantes de los 27.500 primeros puntajes de la PSU, y que nos parece que al estar atado a un instrumento distorsiona el sistema de admisiones”, dijo el titular de la cartera.
El Mineduc busca transformar este beneficio con la finalidad de entregarlo a los planteles de educación superior que tengan un alto nivel de calidad y que reciban a alumnos más vulnerables.
El ministro Beyer señaló que para la presentación de este proyecto de ley escuchará distintas propuestas. “Les hemos pedido que nos hagan un planteamiento en la reunión del próximo mes respecto de cómo el Consejo de Rectores se imagina este instrumento en el futuro”. También se espera recoger las ideas que presenten otras instituciones de educación superior para reformar la entrega de este monto.
Respecto del informe Pearson y de los cambios que requiere la Prueba de Selección Universitaria, el ministro Beyer señaló que “hemos acordado que se requiere impulsar una agenda con plazos definidos para asegurar que los cambios que propone el informe Pearson, que en general fueron bien acogidos por todas las partes, se incorporen a la brevedad posible”.
Beyer insistió que el tema de fondo es la necesidad de una nueva institucionalidad. “Nosotros hemos dicho que hay que modificar la PSU, pero también pensar en cuál debe ser el sistema de admisión que guíe el proceso. Porque uno desearía incorporar nuevos instrumentos y atender a los grupos hoy no representados, desearía tener más investigación, desearía tener otros factores que son tremendamente importantes desde el punto de vista de los estudiantes, de darle mucha más transparencia al sistema y de equilibrar lo que yo he dicho siempre, el interés de los alumnos con el interés de las instituciones”, sostuvo.
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