Buzos tácticos de la Armada continúan rebusca en borde costero de Robinson Crusoe
Las fragatas "Lynch", "Condell", y "Riveros", junto al BMS "Merino" y el ATF "Galvarino", además de aeronaves de la Aviación Naval y la lancha "Arcángel", continúan en el Archipiélago de Juan Fernández en la operación de rebusca de los pasajeros y restos de la aeronave que sufriera un trágico accidente el pasado viernes, cuando intentaba aterrizar en el aeródromo de la isla Robinson Crusoe.
Trabajando conjuntamente con la Fuerza Aérea, el Ejército y, por supuesto, el valioso aporte de los pescadores y habitantes del archipiélago de Juan Fernández, ha destacado en estos días el peligroso trabajo de los buzos tácticos de la Armada, hombres con una voluntad inquebrantable y capacidad de persistir en un entorno altamente exigente, tanto por su condición física como sicológica.
Junto a los pescadores del archipiélago, los buzos tácticos han estado recorriendo las más de 30 grutas que existen en la zona costera de la zona de rebusca, siendo un apoyo fundamental para las acciones que desde el viernes pasado se están realizando en la zona.
Un poco de historia
La especialidad de buzos tácticos tuvo su origen en el año 1957, cuando tres jóvenes Oficiales de la Armada realizaron un curso impartido por un instructor francés, que dejó de manifiesto la necesidad de contar con especialistas preparados para cumplir misiones de demolición submarina de carácter ofensivo y defensivo.
El hito constitutivo se produjo el 5 de agosto de 1959, cuando el Comandante en Jefe de la época, Vicealmirante Leopoldo Fontaine Nakin, creó la subespecialidad de Buceo Táctico de la Armada. Fue en este marco que el 28 de agosto de 1963 se realizó el primer curso de Buceo Táctico de la Armada, impartido por Oficiales chilenos que habían realizado cursos en el extranjero.
Hoy, los buzos tácticos de la Armada son, además de buceadores de combate capacitados en diferentes técnicas y empleo del buceo, paracaidistas militares en sus modalidades de línea estática y libre militar, además de combatientes terrestres. Conocidos como los "guerreros de las botas mojadas", son expresión de la eficiencia y eficacia que caracterizan a combatientes de elite, siempre listos a actuar en toda condición de clima y geografía, como ha quedado demostrado en esta operación de rescate.
Trabajando conjuntamente con la Fuerza Aérea, el Ejército y, por supuesto, el valioso aporte de los pescadores y habitantes del archipiélago de Juan Fernández, ha destacado en estos días el peligroso trabajo de los buzos tácticos de la Armada, hombres con una voluntad inquebrantable y capacidad de persistir en un entorno altamente exigente, tanto por su condición física como sicológica.
Junto a los pescadores del archipiélago, los buzos tácticos han estado recorriendo las más de 30 grutas que existen en la zona costera de la zona de rebusca, siendo un apoyo fundamental para las acciones que desde el viernes pasado se están realizando en la zona.
Un poco de historia
La especialidad de buzos tácticos tuvo su origen en el año 1957, cuando tres jóvenes Oficiales de la Armada realizaron un curso impartido por un instructor francés, que dejó de manifiesto la necesidad de contar con especialistas preparados para cumplir misiones de demolición submarina de carácter ofensivo y defensivo.
El hito constitutivo se produjo el 5 de agosto de 1959, cuando el Comandante en Jefe de la época, Vicealmirante Leopoldo Fontaine Nakin, creó la subespecialidad de Buceo Táctico de la Armada. Fue en este marco que el 28 de agosto de 1963 se realizó el primer curso de Buceo Táctico de la Armada, impartido por Oficiales chilenos que habían realizado cursos en el extranjero.
Hoy, los buzos tácticos de la Armada son, además de buceadores de combate capacitados en diferentes técnicas y empleo del buceo, paracaidistas militares en sus modalidades de línea estática y libre militar, además de combatientes terrestres. Conocidos como los "guerreros de las botas mojadas", son expresión de la eficiencia y eficacia que caracterizan a combatientes de elite, siempre listos a actuar en toda condición de clima y geografía, como ha quedado demostrado en esta operación de rescate.
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