Expertos en derechos humanos alarmados por las ejecuciones crecientes en Irán
12 de marzo, 2014 — Expertos independientes de la ONU en derechos humanos expresaron hoy alarma por el aumento de las ejecuciones en Irán y entre ellas el reciente ahorcamiento de una mujer que había sido forzada a contraer matrimonio cuando tenía quince años.
Esa joven, Farzaneh Moradi, fue ejecutada el pasado 4 de marzo, después de ser juzgada por el asesinato de su esposo tras más de diez años de matrimonio.
En primera instancia Moradi confesó el crimen pero posteriormente explicó que lo había cometido un hombre que la persuadió de que se declarase culpable y le aseguró que una madre joven no sería ejecutada.
La corte no autorizó una revisión de su primera confesión, explicaron en un comunicado estos expertos independientes sobre derechos humanos en Irán, ejecuciones sumarias, tortura, y violencia contra la mujer.
Subrayaron que el de la joven Moradi es otro caso alarmante que demuestra la necesidad de una moratoria inmediata de la pena de muerte en ese país.
Sólo en lo que va de año se han reportado 176 ejecuciones en Irán, la mayoría por delitos relacionados con drogas, lo que viola las leyes internacionales que limitan la pena capital a los crímenes más graves, indicaron los relatores.
Esa joven, Farzaneh Moradi, fue ejecutada el pasado 4 de marzo, después de ser juzgada por el asesinato de su esposo tras más de diez años de matrimonio.
En primera instancia Moradi confesó el crimen pero posteriormente explicó que lo había cometido un hombre que la persuadió de que se declarase culpable y le aseguró que una madre joven no sería ejecutada.
La corte no autorizó una revisión de su primera confesión, explicaron en un comunicado estos expertos independientes sobre derechos humanos en Irán, ejecuciones sumarias, tortura, y violencia contra la mujer.
Subrayaron que el de la joven Moradi es otro caso alarmante que demuestra la necesidad de una moratoria inmediata de la pena de muerte en ese país.
Sólo en lo que va de año se han reportado 176 ejecuciones en Irán, la mayoría por delitos relacionados con drogas, lo que viola las leyes internacionales que limitan la pena capital a los crímenes más graves, indicaron los relatores.
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