diputado: Proyecto que promueve “tolerancia cero” a conducir con alcohol sería votado el martes 5 de julio en Comisión
Proyecto que promueve “tolerancia cero” a conducir con alcohol sería votado el martes 5 de julio en Comisión
Publicado el 23 de junio del 2011
La instancia ha recibido una gran cantidad de indicaciones a la propuesta del Ejecutivo, la cual rebaja el estado de ebriedad de 1 gramo de alcohol a 0,8 gramos y conducir bajo los efectos del alcohol de 0,5 gramos a 0,3 gramos.
Idealmente, en la sesión del próximo martes 5 de julio, la Comisión de Obras Públicas, Transportes y Telecomunicaciones de la Cámara de Diputados votaría en general y particular el proyecto (boletín 7652) del Ejecutivo que modifica la ley N° 18.290, aumentando las sanciones por manejo en estado de ebriedad, bajo la influencia de sustancias estupefacientes o sicotrópicas y bajo la influencia del alcohol.
Así lo estimaron los diputados Javier Hernández (UDI) y Alejandra Sepúlveda (PRI), al tiempo que informaron que la propuesta ha sido bastante discutida y recibido una gran cantidad de indicaciones, en distintas direcciones.
La diputada Sepúlveda indicó que muchas de las modificaciones van en la línea de lo planteado por las organizaciones de víctimas de accidentes de tránsito provocados por personas que conducían en estado de ebriedad.
Dijo que haya materias en las cuales hay visiones divididas, porque mientras unos quieren mantener una norma lo más estricta posible, otros estiman mejor mantener un margen de flexibilidad en lo que se relaciona a la rebaja de 0,5 a 0,3gramos en la norma que define la conducción bajo la influencia del alcohol. No habría mayores cuestionamientos a la disminución de 1 gramo a 0,8 gramos para determinar la conducción en estado de ebriedad.
“Algunos piensan que debería quedarse en un 0,4, pero yo estoy con lo que ha presentado el Ejecutivo porque creo que debemos ser muy drásticos en lo que tiene que ver con este nuevo guarismo. Además, como una señal social que vamos a entregar, no significa si es una cerveza o una copa de vino; estamos diciendo que no se podrá beber y se tendrá tolerancia cero”, enfatizó.
El diputado Hernández dijo que ya se han recogido bastantes opiniones, sin perjuicio que se seguirá escuchando versiones de otras asociaciones de víctimas. “Creo que vienen a nutrir aún más el conocimiento que ya estamos teniendo respecto a que las sanciones tienen que aumentar para disminuir los accidentes y las muertes producto de conducir en estado de ebriedad”, precisó.
Estimó que las objeciones que están encontrando se relacionan a la oportunidad del retiro de la licencia de conducir, tal como lo plantea el proyecto. “Nosotros pretendemos que se castigue inmediatamente cuando la conducción en estado de ebriedad provoca la muerte o un accidente grave. Es ese el objetivo principal que nosotros estamos persiguiendo, independientemente que toda la legislación conduce a tratar de penalizar con mucho más fuerza esta situación”, agregó.
La diputada María Angélica Cristi (UDI) sostuvo que para ella, este tema ha sido una lucha de veinte años y criticó la lentitud con que se ha avanzado. Recalcó que, pese a las últimas reformas, la normativa dejó muchos temas pendientes, resultando ser una ley permisiva y difícil de fiscalizar.
Planteó que esta nueva propuesta es más exigente y efectiva y prolongada en el tiempo, que pueda promover una suerte de “temor reverencial” ante la ley, que provoque un cambio cultural positivo.
Informó que presentó algunas propuestas a la Comisión en orden a pedir al fiscal nacional que, en el caso de la conducción en estado de ebriedad, no se aplique el principio de oportunidad, esto es, que aquellas causas que llegan a la fiscalía por esta situación no sean archivadas, sino que continúen con su proceso.
Además, pidió que se retire la licencia de conducir a las personas que hayan producido un accidente estando ebrios, una vez que sean formalizadas y no recién cuando sean condenadas. Y en caso que se produzca un efecto grave en la víctima o, incluso su muerte, se retire la licencia en forma permanente.
“Si a una persona le es plenamente imputable la responsabilidad de un accidente grave o la muerte de una persona, estando en estado de ebriedad, no hay una razón para que no se le cancele la licencia de por vida”, sentenció.
Publicado el 23 de junio del 2011
La instancia ha recibido una gran cantidad de indicaciones a la propuesta del Ejecutivo, la cual rebaja el estado de ebriedad de 1 gramo de alcohol a 0,8 gramos y conducir bajo los efectos del alcohol de 0,5 gramos a 0,3 gramos.
Idealmente, en la sesión del próximo martes 5 de julio, la Comisión de Obras Públicas, Transportes y Telecomunicaciones de la Cámara de Diputados votaría en general y particular el proyecto (boletín 7652) del Ejecutivo que modifica la ley N° 18.290, aumentando las sanciones por manejo en estado de ebriedad, bajo la influencia de sustancias estupefacientes o sicotrópicas y bajo la influencia del alcohol.
Así lo estimaron los diputados Javier Hernández (UDI) y Alejandra Sepúlveda (PRI), al tiempo que informaron que la propuesta ha sido bastante discutida y recibido una gran cantidad de indicaciones, en distintas direcciones.
La diputada Sepúlveda indicó que muchas de las modificaciones van en la línea de lo planteado por las organizaciones de víctimas de accidentes de tránsito provocados por personas que conducían en estado de ebriedad.
Dijo que haya materias en las cuales hay visiones divididas, porque mientras unos quieren mantener una norma lo más estricta posible, otros estiman mejor mantener un margen de flexibilidad en lo que se relaciona a la rebaja de 0,5 a 0,3gramos en la norma que define la conducción bajo la influencia del alcohol. No habría mayores cuestionamientos a la disminución de 1 gramo a 0,8 gramos para determinar la conducción en estado de ebriedad.
“Algunos piensan que debería quedarse en un 0,4, pero yo estoy con lo que ha presentado el Ejecutivo porque creo que debemos ser muy drásticos en lo que tiene que ver con este nuevo guarismo. Además, como una señal social que vamos a entregar, no significa si es una cerveza o una copa de vino; estamos diciendo que no se podrá beber y se tendrá tolerancia cero”, enfatizó.
El diputado Hernández dijo que ya se han recogido bastantes opiniones, sin perjuicio que se seguirá escuchando versiones de otras asociaciones de víctimas. “Creo que vienen a nutrir aún más el conocimiento que ya estamos teniendo respecto a que las sanciones tienen que aumentar para disminuir los accidentes y las muertes producto de conducir en estado de ebriedad”, precisó.
Estimó que las objeciones que están encontrando se relacionan a la oportunidad del retiro de la licencia de conducir, tal como lo plantea el proyecto. “Nosotros pretendemos que se castigue inmediatamente cuando la conducción en estado de ebriedad provoca la muerte o un accidente grave. Es ese el objetivo principal que nosotros estamos persiguiendo, independientemente que toda la legislación conduce a tratar de penalizar con mucho más fuerza esta situación”, agregó.
La diputada María Angélica Cristi (UDI) sostuvo que para ella, este tema ha sido una lucha de veinte años y criticó la lentitud con que se ha avanzado. Recalcó que, pese a las últimas reformas, la normativa dejó muchos temas pendientes, resultando ser una ley permisiva y difícil de fiscalizar.
Planteó que esta nueva propuesta es más exigente y efectiva y prolongada en el tiempo, que pueda promover una suerte de “temor reverencial” ante la ley, que provoque un cambio cultural positivo.
Informó que presentó algunas propuestas a la Comisión en orden a pedir al fiscal nacional que, en el caso de la conducción en estado de ebriedad, no se aplique el principio de oportunidad, esto es, que aquellas causas que llegan a la fiscalía por esta situación no sean archivadas, sino que continúen con su proceso.
Además, pidió que se retire la licencia de conducir a las personas que hayan producido un accidente estando ebrios, una vez que sean formalizadas y no recién cuando sean condenadas. Y en caso que se produzca un efecto grave en la víctima o, incluso su muerte, se retire la licencia en forma permanente.
“Si a una persona le es plenamente imputable la responsabilidad de un accidente grave o la muerte de una persona, estando en estado de ebriedad, no hay una razón para que no se le cancele la licencia de por vida”, sentenció.
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