El subsecretario de Salud Pública, Jorge Díaz, informó que algunos pasajeros que viajaban en un bus internacional desde Lima, Perú, hacia Santiago, presentaron síntomas gastrointestinales que obligaron a su atención médica en la ciudad de Copiapó. Se trata de 7 de los 57 pasajeros de la máquina.
Luego
de recibir la atención de urgencia y tras habérseles practicado algunos
exámenes de laboratorio, siguieron camino. Sin embargo, al tener
conocimiento que los síntomas continuaron, la autoridad sanitaria
determinó alterar el viaje del bus cerca de las 19 horas y derivarlo
hacia el Hospital de Peñablanca, en las cercanías de Quillota, Región de
Valparaíso.
Esta
medida es consistente con la política de Protección Sanitaria
desarrollada y rigurosa que tiene Chile. Frente a situaciones como ésta,
de un brote de cuadro diarreico severo, que requiere atención médica,
es necesario extremar los cuidados. Por eso se determinó derivar a los
pasajeros al hospital más cercano y apropiado para la emergencia, como
el de Peñablanca, con capacidad de atención suficiente.
El objetivo es proteger la salud de los pacientes, y de los demás pasajeros también.
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