Uso de alimentos no certificados explicarían origen de la dioxina en cerdos
La Subsecretaria de Salud Pública, Jeanette Vega, adelantó a las Comisiones Unidas de Salud y Relaciones Exteriores, los avances de la investigación que sobre este problema realiza el ministerio.
"Creemos que un reducido grupo de pequeños agricultores habría utilizado estos alimentos no certificados, que podrían haber estado contaminados con esta toxina, traspasando la dioxina a los cerdos", dijo Vega, quien acudió a las comisiones parlamentarias con el Director Subrogante del SAG, Oscar Cocha.
Como se recordará, el hallazgo de la toxina fue detectado en el extranjero, en un envío de carne porcina desde Chile, lo que significó el cierre de criaderos y el sacrificio de planteles.
La Subsecretaria de Salud, sin embargo, dijo que se trató de un problema puntual, que sólo afectó al 4% de la producción total de carne porcina del país, por lo que la comercialización internacional está reabierta.
Añadió que "han habido posturas un tanto extremas, la dioxina aumenta el riesgo de cáncer, pero para eso se requiere de una exposición sostenida, pese a ello estamos abordando seriamente el problema". Concluyó en que "esto está controlado, la mayoría de los mercados se han reabierto para la producción chilena".
Laboratorio
En tanto, el diputado Renán Fuentealba, que presidió la reunión de las comisiones unidas, informó que se acordó solicitar al gobierno los fondos necesarios para la adquisición de un laboratorio P4, que pueda detectar la presencia de dioxina en carnes de cualquier tipo, ya que actualmente estos análisis deben realizarse en Canadá.
La comisión también ofició a la mandataria para crear una agencia de inocuidad. "La idea es que ésta permita concentrar las competencias y atribuciones que están dispersas en distintos organismos públicos, para que la fiscalización y control de materias toxicas en alimentos se realicen por un solo organismo", destacó el parlamentario.
"Creemos que un reducido grupo de pequeños agricultores habría utilizado estos alimentos no certificados, que podrían haber estado contaminados con esta toxina, traspasando la dioxina a los cerdos", dijo Vega, quien acudió a las comisiones parlamentarias con el Director Subrogante del SAG, Oscar Cocha.
Como se recordará, el hallazgo de la toxina fue detectado en el extranjero, en un envío de carne porcina desde Chile, lo que significó el cierre de criaderos y el sacrificio de planteles.
La Subsecretaria de Salud, sin embargo, dijo que se trató de un problema puntual, que sólo afectó al 4% de la producción total de carne porcina del país, por lo que la comercialización internacional está reabierta.
Añadió que "han habido posturas un tanto extremas, la dioxina aumenta el riesgo de cáncer, pero para eso se requiere de una exposición sostenida, pese a ello estamos abordando seriamente el problema". Concluyó en que "esto está controlado, la mayoría de los mercados se han reabierto para la producción chilena".
Laboratorio
En tanto, el diputado Renán Fuentealba, que presidió la reunión de las comisiones unidas, informó que se acordó solicitar al gobierno los fondos necesarios para la adquisición de un laboratorio P4, que pueda detectar la presencia de dioxina en carnes de cualquier tipo, ya que actualmente estos análisis deben realizarse en Canadá.
La comisión también ofició a la mandataria para crear una agencia de inocuidad. "La idea es que ésta permita concentrar las competencias y atribuciones que están dispersas en distintos organismos públicos, para que la fiscalización y control de materias toxicas en alimentos se realicen por un solo organismo", destacó el parlamentario.
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