Los cambios tecnológicos y sociales en el período Entre Guerras .
La experiencia de la Primera Guerra Mundial aceleró grandemente los cambios , tanto sociales como tecnológicos en la era de Pre Guerra. Las necesidades de combate y la movilización económica espolearon la invención y la audacia.
Las exigencias militares pusieron de relieve la importancia del aeroplano; el bloque británico estimuló el desarrollo de productos sintéticos en Alemania.
Los vehículos motorizados.
Fue análogo el caso del automóvil: al estallar el conflicto vehículos arrastrados por caballos abundaban en las calles y en las carreteras de Europa; hacia fines de la guerra, ocurría al revés. Los ejércitos habían entrado a la guerra casi completamente dependientes del transporte por medio de caballos, Cuando terminó la lucha, aunque la artillería utilizaba todavía tracción animal, el éxito de los camiones, tanques y ambulancias motorizadas convenció de que el futuro estaba en manos de las máquinas de combustión interna.
El mismo aceleramiento del desarrollo era evidente en el caso de las innovaciones técnicas que habían encontrado una aplicación menos directa a las necesidades de la guerra: el potencial eléctrico, la radio y la cinematografía.
La electricidad .
La década de 1920 contempló el cambio decisivo que produjo la electricidad en un campo tras otro. Hacia fines de la década un edificio urbano sin electricidad se consideraba anticuado y la electrificación de las tierras campesinas se había convertido en el objetivo principal de todas las naciones que querían estar a la vanguardia de las naciones tecnológicas.
La radio y el cine .
En el caso de la radio y la cinematografía, entretenimientos que antes de 1914 habían sido novedades extraordinarias y emocionantes, a mediados de la década de 1920 era ya algo corriente. Ninguna casa decente carecía entonces de su receptor de radio. La asistencia al cine se había convertido en la forma acostumbrada de entretenimiento barato en todas partes, a excepción de los pueblos chicos y aldeas más pequeñas. Y en la segunda mitad de la década, el cine empezó a transformar aún más el campo y el carácter de los entretenimientos.
Los nuevos medios de comunicación .
Durante la década iniciada en el año de 1920, las nuevas formas de entretenimiento, así como los nuevos medios de comunicación, comenzaron a poner en contacto directo al campesinado con la metrópolis, de una manera nunca vista. Líneas de autobuses rurales unían a las aldeas que jamás habían sido alcanzadas por los más pequeños ferrocarriles y cada año que pasaba se extendía la red telefónica a las comunidades remotas .
Los aviones .
Los medios de comunicación comenzaron a extenderse más allá de las fronteras nacionales y continentales. Los europeos avanzaron rápidamente en el desarrollo de la aviación comercial. A comienzos de 1919 dos pilotos británicos efectuaban el primer vuelo a través del Atlántico. Sólo unos pocos años después fue inaugurado el servicio regular entre las principales ciudades europeas. Desde 1920, cuando los holandeses instituyeron un servicio regular aéreo entre Amsterdam y Londres, cada año se contemplaba la inauguración de alguna nueva línea que unía la mayor cantidad de capitales europeas. Hacia fines de la década, los europeos inauguraban una mayor cantidad de estos servicios a sus más remotas colonias asiáticas y africanas. Sin embargo en vísperas de la Segunda Guerra Mundial, Europa y Estados Unidos, que estaban conectados por teléfono desde 1927 , iban a estarlo por un servicio aéreo regular.
En los Estados Unidos la explotación de los nuevos métodos de comunicación y transporte se dejaba generalmente a la empresa privada; la regla era la competencia y la iniciativa independiente. En Europa, por el contrario, el gobierno casi siempre intervenía ya sea para administrar el nuevo servicio mismo o para establecer un monopolio. Así la transmisión del modelo de la BBC fundada en 1922, estaba casi siempre monopolizada por el Estado. Y la aviación comercial se daba por arrendamientos a compañía individuales sobre una base de no competencia.
Stuart Hughes: “Historia de Europa Contemporánea”, 1966, pp, 118
Las exigencias militares pusieron de relieve la importancia del aeroplano; el bloque británico estimuló el desarrollo de productos sintéticos en Alemania.
Los vehículos motorizados.
Fue análogo el caso del automóvil: al estallar el conflicto vehículos arrastrados por caballos abundaban en las calles y en las carreteras de Europa; hacia fines de la guerra, ocurría al revés. Los ejércitos habían entrado a la guerra casi completamente dependientes del transporte por medio de caballos, Cuando terminó la lucha, aunque la artillería utilizaba todavía tracción animal, el éxito de los camiones, tanques y ambulancias motorizadas convenció de que el futuro estaba en manos de las máquinas de combustión interna.
El mismo aceleramiento del desarrollo era evidente en el caso de las innovaciones técnicas que habían encontrado una aplicación menos directa a las necesidades de la guerra: el potencial eléctrico, la radio y la cinematografía.
La electricidad .
La década de 1920 contempló el cambio decisivo que produjo la electricidad en un campo tras otro. Hacia fines de la década un edificio urbano sin electricidad se consideraba anticuado y la electrificación de las tierras campesinas se había convertido en el objetivo principal de todas las naciones que querían estar a la vanguardia de las naciones tecnológicas.
La radio y el cine .
En el caso de la radio y la cinematografía, entretenimientos que antes de 1914 habían sido novedades extraordinarias y emocionantes, a mediados de la década de 1920 era ya algo corriente. Ninguna casa decente carecía entonces de su receptor de radio. La asistencia al cine se había convertido en la forma acostumbrada de entretenimiento barato en todas partes, a excepción de los pueblos chicos y aldeas más pequeñas. Y en la segunda mitad de la década, el cine empezó a transformar aún más el campo y el carácter de los entretenimientos.
Los nuevos medios de comunicación .
Durante la década iniciada en el año de 1920, las nuevas formas de entretenimiento, así como los nuevos medios de comunicación, comenzaron a poner en contacto directo al campesinado con la metrópolis, de una manera nunca vista. Líneas de autobuses rurales unían a las aldeas que jamás habían sido alcanzadas por los más pequeños ferrocarriles y cada año que pasaba se extendía la red telefónica a las comunidades remotas .
Los aviones .
Los medios de comunicación comenzaron a extenderse más allá de las fronteras nacionales y continentales. Los europeos avanzaron rápidamente en el desarrollo de la aviación comercial. A comienzos de 1919 dos pilotos británicos efectuaban el primer vuelo a través del Atlántico. Sólo unos pocos años después fue inaugurado el servicio regular entre las principales ciudades europeas. Desde 1920, cuando los holandeses instituyeron un servicio regular aéreo entre Amsterdam y Londres, cada año se contemplaba la inauguración de alguna nueva línea que unía la mayor cantidad de capitales europeas. Hacia fines de la década, los europeos inauguraban una mayor cantidad de estos servicios a sus más remotas colonias asiáticas y africanas. Sin embargo en vísperas de la Segunda Guerra Mundial, Europa y Estados Unidos, que estaban conectados por teléfono desde 1927 , iban a estarlo por un servicio aéreo regular.
En los Estados Unidos la explotación de los nuevos métodos de comunicación y transporte se dejaba generalmente a la empresa privada; la regla era la competencia y la iniciativa independiente. En Europa, por el contrario, el gobierno casi siempre intervenía ya sea para administrar el nuevo servicio mismo o para establecer un monopolio. Así la transmisión del modelo de la BBC fundada en 1922, estaba casi siempre monopolizada por el Estado. Y la aviación comercial se daba por arrendamientos a compañía individuales sobre una base de no competencia.
Stuart Hughes: “Historia de Europa Contemporánea”, 1966, pp, 118
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