Centro de investigación mexicano aprovecha los descartes de camarón y jaiba para fabricar 'aerogeles'
Investigadores del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) trabajan en el desarrollo de nuevos materiales conocidos como aerogeles, que pueden ser usados en las industria alimenticia y farmacéutica.
Martes, 31 de Enero de 2012
Los aerogeles son estructuras porosas muy pequeñas y uniformes creadas a partir del quitosano, que tienen la capacidad de absorber diversas sustancias.
Jaime Lizardi Mendoza, investigador del Área de Biopolímeros de la Coordinación de Tecnologías de Alimentos de Origen Animal (CTAOA), explica que los aerogeles sirven para inmovilizar enzimas, compuestos bioactivos, fármacos y otros extractos.
También son útiles para absorber metales para un tratamiento de aguas, absorber proteínas, o para usarlos en la recuperación de compuestos de interés.
El equipo de expertos trabajará en el proyecto ‘Formación y propiedades de estructuras porosas nanoestructuradas de quitosano’ durante tres años.
El quitosano se obtiene luego de procesar la quitina (polisacárido) presente en los desperdicios de los camarones (cabeza, cáscara) y en el caparazón de las jaibas.
Según detalla Lizardi Mendoza, esos materiales actúan como “esponjitas” de quitosano. “Se trabaja con quitosano porque tiene grupos funcionales que pueden ser utilizados para inmovilizar moléculas, proteínas o sustancias, y por eso vamos a estudiar la estructura a partir de distintas soluciones, de diversas formas de tratar el quitosano, obteniendo diferentes estructuras, observando cómo cambia y cuál es su función”, señala el investigador.
En cuanto los científicos descubran cómo se modifican las estructuras porosas nanoestructuradas de quitosano, sabrán cómo generarlas. Además, pretenden analizar sus posibles aplicaciones y ver que de qué forma funcionan mejor para cada uso diferente. FIS
fuente. prochile
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