Subsecretario de Redes Asistenciales anunció que se aumentará número de hospitales acreditados en 2012
A fines del próximo año la red pública de salud contará con al menos 60 hospitales certificados por las entidades acreditadoras externas autorizadas y fiscalizadas por la Superintendencia de Salud. Este número duplica la cifra inicial propuesta a mediados de este año por el Ministerio de Salud que previó que en 2012 tendría alrededor de 28 recintos asistenciales cumpliendo con los criterios de calidad que exige la reforma sanitaria.
Así lo anunció el subsecretario de Redes Asistenciales Luis Castillo, tras visitar junto al Superintendente de Salud, Luis Romero el Instituto Nacional del Tórax, uno de los recintos que está trabajando para cumplir con los requerimientos de la Acreditación de Calidad.
‘‘Hemos venido a anunciar que hemos ampliado el número de hospitales que vamos a acreditar el próximo año, vamos a poder de aumentar de 28 a 52 los recintos (…) Este año hemos hecho un seguimiento a casi todos los hospitales que están en proceso de acreditación y nos hemos dado cuenta que están trabajando bastante bien no sólo en términos de trato, sino que también han reducido las listas de espera Auge y no Auge quirúrgica de más un año. Además, están mejorando los estándares de seguridad de los enfermos’‘, dijo Castillo.
La autoridad explicó que la acreditación es una importante herramienta para los usuarios que les asegura que el recinto asistencial tiene estándares de calidad que reducen los riesgos que pueden surgir al estar hospitalizado. Además, incluye un importante factor de seguridad en la atención, es decir, se fijan protocolos internos que buscan reducir posibles problemas durante prestación de salud. Por ejemplo, la acreditación demanda que los pacientes hospitalizados deben usar pulseras donde está su nombre o que los pacientes quirúrgicos deben ser visitados por un anestesista ante de cualquier intervención, las camas clínicas deben poseer barandas para evitar la caída de los enfermos, planes de evacuación claros, entre otros aspectos.
El subsecretario destacó que la acreditación de los hospitales públicos es una exigencia que deberán cumplir todos los recintos asistenciales a contar del 1 de julio de 2013, cuando entre en vigencia la cuarta garantía explícita del Auge (las anteriores son de acceso, oportunidad y protección financiera). Esto significa que todos los pacientes que estén bajo el tratamiento del plan de garantías sólo podrán ser atendidos en aquellos recintos que estén cumpliendo con criterios de seguridad y atención que establece la acreditación.
A la fecha, el sistema público cuenta con sólo dos hospitales acreditados (Instituto Nacional del Cáncer y Exequiel González Cortes). Mientras que en el sistema privado un total de 22 instituciones están acreditadas: seis instituciones cerradas, 15 centros de atención abierta (centros médicos) y un centro siquiátrico.
Así lo anunció el subsecretario de Redes Asistenciales Luis Castillo, tras visitar junto al Superintendente de Salud, Luis Romero el Instituto Nacional del Tórax, uno de los recintos que está trabajando para cumplir con los requerimientos de la Acreditación de Calidad.
‘‘Hemos venido a anunciar que hemos ampliado el número de hospitales que vamos a acreditar el próximo año, vamos a poder de aumentar de 28 a 52 los recintos (…) Este año hemos hecho un seguimiento a casi todos los hospitales que están en proceso de acreditación y nos hemos dado cuenta que están trabajando bastante bien no sólo en términos de trato, sino que también han reducido las listas de espera Auge y no Auge quirúrgica de más un año. Además, están mejorando los estándares de seguridad de los enfermos’‘, dijo Castillo.
La autoridad explicó que la acreditación es una importante herramienta para los usuarios que les asegura que el recinto asistencial tiene estándares de calidad que reducen los riesgos que pueden surgir al estar hospitalizado. Además, incluye un importante factor de seguridad en la atención, es decir, se fijan protocolos internos que buscan reducir posibles problemas durante prestación de salud. Por ejemplo, la acreditación demanda que los pacientes hospitalizados deben usar pulseras donde está su nombre o que los pacientes quirúrgicos deben ser visitados por un anestesista ante de cualquier intervención, las camas clínicas deben poseer barandas para evitar la caída de los enfermos, planes de evacuación claros, entre otros aspectos.
El subsecretario destacó que la acreditación de los hospitales públicos es una exigencia que deberán cumplir todos los recintos asistenciales a contar del 1 de julio de 2013, cuando entre en vigencia la cuarta garantía explícita del Auge (las anteriores son de acceso, oportunidad y protección financiera). Esto significa que todos los pacientes que estén bajo el tratamiento del plan de garantías sólo podrán ser atendidos en aquellos recintos que estén cumpliendo con criterios de seguridad y atención que establece la acreditación.
A la fecha, el sistema público cuenta con sólo dos hospitales acreditados (Instituto Nacional del Cáncer y Exequiel González Cortes). Mientras que en el sistema privado un total de 22 instituciones están acreditadas: seis instituciones cerradas, 15 centros de atención abierta (centros médicos) y un centro siquiátrico.
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