Según un estudio el 6% de los productos de pescado vendidos en supermercados del Reino Unido no están bien etiquetados
Según un estudio el 6% de los productos de pescado vendidos en supermercados del Reino Unido no están bien etiquetados
Este estudio, realizado sobre 400 productos elaborados con pescado y vendido en los principales supermercados británicos, reveló que algunos contenían especies distintas a las indicadas en las etiquetas.
Jueves, 28 de Abril de 2011
Un estudio realizado sobre 400 productos elaborados con pescado que se venden en los principales supermercados del Reino Unido reveló que algunos contenían especies distintas a las indicadas en las etiquetas. Y en general, se trataba de especies de mucho menos valor.
En la investigación se utilizaron muestras de alimentos preparados de Asda, Tesco, Sainsbury’s, Morrisons, Waitrose y Lidl.
Investigadores de la Universidad de Bangor, en Gales, detectaron que 23 porciones -el 6%, de las muestras- contenían especies de pescado que no figuraban en las etiquetas.
Los británicos consumen 4.400 millones de porciones de pescado anualmente, lo que significa que 264 millones de porciones podrían contener algún tipo de pescado que no corresponde al indicado por el fabricante.
Un envase de Young's Flipper Dippers, etiquetado como colín de Alaska, contenía en realidad bagre vietnamita (panga) de agua dulce. En Waitrose, una tarta de eglefino (haddock) ahumado tenía una etiqueta que decía "eglefino descamado del Atlántico norte", pero contenía bacalao del Pacífico, que es una especie más barata, informó el diario Daily Mail.
Cuatro de los 63 productos pesqueros obtenidos en Tesco no contenían el pescado especificado en los envases. Por ejemplo: la tarta cremosa de pescado estaba preparada con bacalao, en lugar del eglefino ahumado de primera calidad que promocionaba.
Por otra parte, 3 de las 59 muestras de Asda no superaron las pruebas de ADN: las tartas de bacalao en realidad contenían eglefino, y la tarta y los filetes de eglefino eran, en cambio, de bacalao del Atlántico.
Una cuarta parte de las 12 muestras de Lidl tampoco pasaron la prueba.
En Morrisons, 6 de los 71 productos analizados estaban mal etiquetados y en Sainsbury, 2 de 63 muestras tenían un bacalao mucho más barato que el indicado en la etiqueta.
"El estudio muestra que la proporción total de casos de mal etiquetado parece ser baja, pero ésta es una industria enorme", dijo la doctora Sarah Helyar, que realizó el análisis para la investigación de Greenpeace-Sunday Times.
"Si se repite en las tiendas de toda la nación, el impacto, sin duda, sería significativo por sus consecuencias para la conservación y la administración de nuestros stocks de peces y para los costos para los consumidores", agregó.
Gary Carvalho, profesor de ecología molecular de la Universidad de Bangor y experto en genética ictícola, supervisó el estudio. El investigador opina que el mal etiquetado socava la conservación y la administración de los stocks pesqueros que ya están agotándose.
"[El estudio] sugiere que hay pescado que se desembarca y comercializa fuera de las cuotas establecidas por los gobiernos para las especies vulnerables", señaló.
Tesco, Sainsbury’s y Waitrose se comprometieron esta semana a iniciar una investigación de inmediato sobre los hallazgos de la investigación.
"No pudimos ver los resultados en detalle y las pruebas de ADN de esta naturaleza no siempre son confiables", respondió Andrew Opie, director de alimentos y sustentabilidad para el Consorcio Minorista Británico. FIS
fuente: prochile
Este estudio, realizado sobre 400 productos elaborados con pescado y vendido en los principales supermercados británicos, reveló que algunos contenían especies distintas a las indicadas en las etiquetas.
Jueves, 28 de Abril de 2011
Un estudio realizado sobre 400 productos elaborados con pescado que se venden en los principales supermercados del Reino Unido reveló que algunos contenían especies distintas a las indicadas en las etiquetas. Y en general, se trataba de especies de mucho menos valor.
En la investigación se utilizaron muestras de alimentos preparados de Asda, Tesco, Sainsbury’s, Morrisons, Waitrose y Lidl.
Investigadores de la Universidad de Bangor, en Gales, detectaron que 23 porciones -el 6%, de las muestras- contenían especies de pescado que no figuraban en las etiquetas.
Los británicos consumen 4.400 millones de porciones de pescado anualmente, lo que significa que 264 millones de porciones podrían contener algún tipo de pescado que no corresponde al indicado por el fabricante.
Un envase de Young's Flipper Dippers, etiquetado como colín de Alaska, contenía en realidad bagre vietnamita (panga) de agua dulce. En Waitrose, una tarta de eglefino (haddock) ahumado tenía una etiqueta que decía "eglefino descamado del Atlántico norte", pero contenía bacalao del Pacífico, que es una especie más barata, informó el diario Daily Mail.
Cuatro de los 63 productos pesqueros obtenidos en Tesco no contenían el pescado especificado en los envases. Por ejemplo: la tarta cremosa de pescado estaba preparada con bacalao, en lugar del eglefino ahumado de primera calidad que promocionaba.
Por otra parte, 3 de las 59 muestras de Asda no superaron las pruebas de ADN: las tartas de bacalao en realidad contenían eglefino, y la tarta y los filetes de eglefino eran, en cambio, de bacalao del Atlántico.
Una cuarta parte de las 12 muestras de Lidl tampoco pasaron la prueba.
En Morrisons, 6 de los 71 productos analizados estaban mal etiquetados y en Sainsbury, 2 de 63 muestras tenían un bacalao mucho más barato que el indicado en la etiqueta.
"El estudio muestra que la proporción total de casos de mal etiquetado parece ser baja, pero ésta es una industria enorme", dijo la doctora Sarah Helyar, que realizó el análisis para la investigación de Greenpeace-Sunday Times.
"Si se repite en las tiendas de toda la nación, el impacto, sin duda, sería significativo por sus consecuencias para la conservación y la administración de nuestros stocks de peces y para los costos para los consumidores", agregó.
Gary Carvalho, profesor de ecología molecular de la Universidad de Bangor y experto en genética ictícola, supervisó el estudio. El investigador opina que el mal etiquetado socava la conservación y la administración de los stocks pesqueros que ya están agotándose.
"[El estudio] sugiere que hay pescado que se desembarca y comercializa fuera de las cuotas establecidas por los gobiernos para las especies vulnerables", señaló.
Tesco, Sainsbury’s y Waitrose se comprometieron esta semana a iniciar una investigación de inmediato sobre los hallazgos de la investigación.
"No pudimos ver los resultados en detalle y las pruebas de ADN de esta naturaleza no siempre son confiables", respondió Andrew Opie, director de alimentos y sustentabilidad para el Consorcio Minorista Británico. FIS
fuente: prochile
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