SERNAC INFORMA SOBRE DERECHOS DE LOS CONSUMIDORES EN GIMNASIOS
DERECHOS DE LOS CONSUMIDORES EN LOS GIMNASIOS
• Está comenzando la primavera y muchas personas están preocupadas de poder lucir bien físicamente para cuando llegue el verano, por lo que recurren a los gimnasios. Pero adivine: también tiene derechos como consumidor.
Se terminó el invierno y las Fiestas Patrias, lo que seguramente dejó a muchos con varios kilos de más, por lo que decidirán bajarlos en un gimnasio. Por eso es importante conocer los derechos al momento de contratar este tipo de servicios.
Sebastián Fernández, Director Regional de SERNAC explica que es derecho del consumidor que las empresas que ofrecen este tipo de servicios les informen claramente las condiciones relevantes del servicio, tales como el costo final, la modalidad de pago y formas de terminar los contratos.
Asimismo, señala la autoridad, los gimnasios deben entregar un servicio de calidad, asegurar condiciones de seguridad, contar con personal idóneo, respetar lo ofrecido, publicitado y lo acordado con el consumidor y responder si hacen un mal trabajo.
Fernández aconseja a los consumidores cotizar y premiar con su contratación a aquellos locales que tengan sus patentes y permisos sanitarios al día y que visiblemente entreguen las condiciones adecuadas para realizar la actividad.
“Los gimnasios como toda empresa tienen la obligación de respetar los horarios de clases pactados o las características ofrecidas como infraestructura, tipo de clases etc. Lo que se ofrezca en la publicidad forma parte del contrato y se debe cumplir”, señaló el Director.
La autoridad agrega que los carteles en los que las empresas se desentienden de su responsabilidad no respondiendo por daños, accidentes o robos no tienen validez pues es su deber entregar un servicio que no afecte la salud o seguridad de los consumidores.
En qué fijarse antes de contratar
Sebastián Fernández señaló que los consumidores al momento de contratar este tipo de servicios deberían tomar en consideración una serie de consejos para no encontrarse con sorpresas desagradables a futuro. Entre ellas:
Infraestructura: Fijarse en la cantidad y calidad de las instalaciones, máquinas e implementos deportivos disponibles para la actividad. Es importante poner atención en la variedad y estado de las máquinas, el tipo de piso y muros, el estado de los camarines y servicios higiénicos, número de duchas por persona; sistema de ventilación y calefacción.
Servicios: Evaluar los servicios, es decir, la planificación del trabajo y la supervisión al alumno. Fijarse si el instructor realiza una evaluación diagnóstica de la condición física del alumno; si consulta sus intereses, si recomienda alguna actividad física en particular, si entrega un plan de trabajo que controla y evalúa, si explica los ejercicios, lo guía y lo corrige durante su ejecución.
Seguridad e Higiene: Cerciorarse de las condiciones generales de seguridad, por ejemplo, presencia de extintores y vías de evacuación, pisos antideslizantes en las duchas, limpieza en el interior del recinto etc.
Contratos: Ponga atención a las condiciones fijadas en los contratos suscritos, especialmente al tiempo de duración, horarios, causales de término, etc. Recuerde que éstos no pueden ser modificados o renunciados una vez firmados. Ante incumplimiento en las condiciones de los contratos, el consumidor debe exigir lo ofertado directamente al proveedor.
Información: Exigir información sobre disponibilidad de horarios, sus derechos y deberes como usuario, el número de clases incluidas en la mensualidad, la modalidad para recuperarlas y el precio.
Finalmente, es recomendable que siempre antes de iniciar una rutina física de este tipo, tenga las indicaciones médicas necesarias.
• Está comenzando la primavera y muchas personas están preocupadas de poder lucir bien físicamente para cuando llegue el verano, por lo que recurren a los gimnasios. Pero adivine: también tiene derechos como consumidor.
Se terminó el invierno y las Fiestas Patrias, lo que seguramente dejó a muchos con varios kilos de más, por lo que decidirán bajarlos en un gimnasio. Por eso es importante conocer los derechos al momento de contratar este tipo de servicios.
Sebastián Fernández, Director Regional de SERNAC explica que es derecho del consumidor que las empresas que ofrecen este tipo de servicios les informen claramente las condiciones relevantes del servicio, tales como el costo final, la modalidad de pago y formas de terminar los contratos.
Asimismo, señala la autoridad, los gimnasios deben entregar un servicio de calidad, asegurar condiciones de seguridad, contar con personal idóneo, respetar lo ofrecido, publicitado y lo acordado con el consumidor y responder si hacen un mal trabajo.
Fernández aconseja a los consumidores cotizar y premiar con su contratación a aquellos locales que tengan sus patentes y permisos sanitarios al día y que visiblemente entreguen las condiciones adecuadas para realizar la actividad.
“Los gimnasios como toda empresa tienen la obligación de respetar los horarios de clases pactados o las características ofrecidas como infraestructura, tipo de clases etc. Lo que se ofrezca en la publicidad forma parte del contrato y se debe cumplir”, señaló el Director.
La autoridad agrega que los carteles en los que las empresas se desentienden de su responsabilidad no respondiendo por daños, accidentes o robos no tienen validez pues es su deber entregar un servicio que no afecte la salud o seguridad de los consumidores.
En qué fijarse antes de contratar
Sebastián Fernández señaló que los consumidores al momento de contratar este tipo de servicios deberían tomar en consideración una serie de consejos para no encontrarse con sorpresas desagradables a futuro. Entre ellas:
Infraestructura: Fijarse en la cantidad y calidad de las instalaciones, máquinas e implementos deportivos disponibles para la actividad. Es importante poner atención en la variedad y estado de las máquinas, el tipo de piso y muros, el estado de los camarines y servicios higiénicos, número de duchas por persona; sistema de ventilación y calefacción.
Servicios: Evaluar los servicios, es decir, la planificación del trabajo y la supervisión al alumno. Fijarse si el instructor realiza una evaluación diagnóstica de la condición física del alumno; si consulta sus intereses, si recomienda alguna actividad física en particular, si entrega un plan de trabajo que controla y evalúa, si explica los ejercicios, lo guía y lo corrige durante su ejecución.
Seguridad e Higiene: Cerciorarse de las condiciones generales de seguridad, por ejemplo, presencia de extintores y vías de evacuación, pisos antideslizantes en las duchas, limpieza en el interior del recinto etc.
Contratos: Ponga atención a las condiciones fijadas en los contratos suscritos, especialmente al tiempo de duración, horarios, causales de término, etc. Recuerde que éstos no pueden ser modificados o renunciados una vez firmados. Ante incumplimiento en las condiciones de los contratos, el consumidor debe exigir lo ofertado directamente al proveedor.
Información: Exigir información sobre disponibilidad de horarios, sus derechos y deberes como usuario, el número de clases incluidas en la mensualidad, la modalidad para recuperarlas y el precio.
Finalmente, es recomendable que siempre antes de iniciar una rutina física de este tipo, tenga las indicaciones médicas necesarias.
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