Familia de Valparaíso feliz tras recibir camas para sus hijos
Familia de Valparaíso feliz tras recibir camas para sus hijos
- La iniciativa favorece a una familia del campamento del cerro Molino que vive en precarias condiciones habitacionales.
Jasmine Montecinos vive hace 12 años en el campamento Simpson del cerro
Molino y este lunes cumplió un gran sueño: que sus hijos duerman en una
cama propia.
Ello, gracias a la gestión multisectorial propiciada por la Fundación Ilumina, la Secretaría Ejecutiva Campamentos del MINVU, el Programa Campamentos V Región y el apoyo de la Municipalidad de Valparaíso.
Esto se enmarca dentro de la gestión que desarrollan tanto entidades
públicas como privadas para apoyar a familias que viven en situación de
campamento.
Junto a su marido e hijos, esta porteña recibió feliz estas camas, ayuda que marca un cambio importante en su vida diaria, hacia una vida familiar mejor y más cómoda.
“Este regalo nos llena de alegría, porque dormíamos incómodos en una cama de dos plazas cuatro personas y no tenía la privacidad de dormir sola con mi marido. Llevo 12 años en este campamento, tengo 4 hijos y sólo tenía tres camas, por lo que los más grandes dormían solos y los dos más chicos conmigo. En verdad es estoy muy contenta y agradecida de esta entrega”, expresó emocionada.
Tras la ceremonia, que se efectuó en el mismo sector, el alcalde (s) Jaime Varas dijo que con esto se “está contribuyendo a mejorar la calidad de vida de las personas que habitan este lugar. Mientras se busca erradicar los campamentos, es bueno ocupar esta ayuda para mejorar su calidad de vida. Es una iniciativa que no sólo tiene el apoyo de la municipalidad, también su acompañamiento y esperamos que se siga avanzando en esta línea”.
Por su parte, el seremi de Vivienda y Urbanismo, Matías Avsolomich manifestó que esta entrega de camas forma parte de una “una mirada multisectorial donde hemos beneficiado a 130 niños de la Región de Valparaíso que no pueden tener una cama para descansar y desarrollarse. En esto, el Minvu no está solo, esto es un alto en el camino dentro del mundo privado que se ocupa de producir y comercializar productos y hoy vemos que también hay una oportunidad para familias vulnerables”.
El objetivo principal de este tipo de ayudas a familias que viven en situación de campamentos, según explicó el secretario ejecutivo de “Aldea y Campamento”, Matías Claro se basa en que “para construir una familia se necesita tanto una vivienda como capital social, por eso estamos entregando camas, preocupándonos por el ambiente, por las mujeres, los niveles educacionales, de manera que estas familias vayan surgiendo. Nuestra clave son los niños”.
Para el director (s) del Serviu, José Herrera dar este tipo de noticias “nos alegran mucho, vale decir, entregar dos camas a familias que viven en campamentos. Como Serviu hemos trabajado intensamente en la erradicación de campamentos a nivel regional y esta iniciativa nos llena de orgullo, porque evidencia el trabajo entre el mundo público con el privado, lo que nos permite entregar más de 40 camas a nivel regional”.
La entrega de camas en el campamento Simpson del cerro Molino busca mejorar la calidad de vida de sus habitantes y se enmarca en un programa que beneficia a 134 familias de 34 campamentos de toda la región.
Este campamento data 1977, en donde se registra la llegada de las primeras familias a estos terrenos privados. Actualmente, cuenta con 25 familias que viven en precarias condiciones y que están en busca de solución habitacional que les permita salir de la pobreza.
Junto a su marido e hijos, esta porteña recibió feliz estas camas, ayuda que marca un cambio importante en su vida diaria, hacia una vida familiar mejor y más cómoda.
“Este regalo nos llena de alegría, porque dormíamos incómodos en una cama de dos plazas cuatro personas y no tenía la privacidad de dormir sola con mi marido. Llevo 12 años en este campamento, tengo 4 hijos y sólo tenía tres camas, por lo que los más grandes dormían solos y los dos más chicos conmigo. En verdad es estoy muy contenta y agradecida de esta entrega”, expresó emocionada.
Tras la ceremonia, que se efectuó en el mismo sector, el alcalde (s) Jaime Varas dijo que con esto se “está contribuyendo a mejorar la calidad de vida de las personas que habitan este lugar. Mientras se busca erradicar los campamentos, es bueno ocupar esta ayuda para mejorar su calidad de vida. Es una iniciativa que no sólo tiene el apoyo de la municipalidad, también su acompañamiento y esperamos que se siga avanzando en esta línea”.
Por su parte, el seremi de Vivienda y Urbanismo, Matías Avsolomich manifestó que esta entrega de camas forma parte de una “una mirada multisectorial donde hemos beneficiado a 130 niños de la Región de Valparaíso que no pueden tener una cama para descansar y desarrollarse. En esto, el Minvu no está solo, esto es un alto en el camino dentro del mundo privado que se ocupa de producir y comercializar productos y hoy vemos que también hay una oportunidad para familias vulnerables”.
El objetivo principal de este tipo de ayudas a familias que viven en situación de campamentos, según explicó el secretario ejecutivo de “Aldea y Campamento”, Matías Claro se basa en que “para construir una familia se necesita tanto una vivienda como capital social, por eso estamos entregando camas, preocupándonos por el ambiente, por las mujeres, los niveles educacionales, de manera que estas familias vayan surgiendo. Nuestra clave son los niños”.
Para el director (s) del Serviu, José Herrera dar este tipo de noticias “nos alegran mucho, vale decir, entregar dos camas a familias que viven en campamentos. Como Serviu hemos trabajado intensamente en la erradicación de campamentos a nivel regional y esta iniciativa nos llena de orgullo, porque evidencia el trabajo entre el mundo público con el privado, lo que nos permite entregar más de 40 camas a nivel regional”.
La entrega de camas en el campamento Simpson del cerro Molino busca mejorar la calidad de vida de sus habitantes y se enmarca en un programa que beneficia a 134 familias de 34 campamentos de toda la región.
Este campamento data 1977, en donde se registra la llegada de las primeras familias a estos terrenos privados. Actualmente, cuenta con 25 familias que viven en precarias condiciones y que están en busca de solución habitacional que les permita salir de la pobreza.
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