ALCALDE DE VALDIVIA FIJÓ POSTURA EN TEMAS DE LA SALUD PRIMARIA
La conformación de una mesa tripartita para mejorar a tiempo las disparidades financieras en que hoy se desenvuelve en la salud municipal, fue parte de la propuesta que en Antofagasta entregó el vicepresidente ejecutivo de la Asociación Chilena de Municipios, y alcalde de Valdivia, Bernardo Berger.
El timonel valdiviano fue invitado en calidad de panelista exponer la visión del municipalismo respecto al estado de la salud dependiente de las municipalidades, en el último congreso de alcaldes y concejales realizado en la ciudad nortina.
La experiencia local, tanto en las formas de mejorar la calidad de la atención como en la aplicación del modelo de salud familiar –la comuna fue una de las primeras en Chile en adaptar este sistema– fueron los elementos para invitar al edil valdiviano como expositor en el tema.
“Existen al menos cinco puntos que preocupan a los municipios en materia de salud, y que requieren sentarse a una mesa a conversar, todos los actores involucrados en la toma de decisión, esto es, el ministerio de Salud, la Confederación de Trabajadores de la Salud (CONFUSAM) y por su puesto los municipios, quien somos los que administramos el sistema”, sostuvo Berger.
El edil explicó que encabeza la lista de puntos, la urgencia de corregir y aumentar el aporte per cápita por usuario atendido , y que hoy alcanza a apenas 2 mil 130 pesos mensuales.
“Esta cifra no alcanza siquiera para un set de aspirinas. Los estudios de la propia Asociación Chilena de municipios indican que al menos debiera elevarse a 3 mil pesos, y los que realizó la Universidad Católica hablan de un piso mínimo de 3 mil 700 pesos”, indicó.
Junto con el aumento del per cápita, la segunda demanda apuntar a corregir los factores a través de los cuales se calcula este aporte.
También forman parte de la lista de temas la revisión de los aportes que se entregan a las comunas de “costo fijo”, que son aquellas de baja población y que no alcanzan con el per cápita a cubrir los requerimientos mínimos de atención. Por ello, reciben una suma fija de recursos, independiente del número de usuarios que registre.
“El problema que el costo fijo es antiguo, no se ha actualizado ni considera una serie de nuevas exigencias y prestaciones que los consultorios deben hacer. Como hablamos aquí a la par de las comunas más pobres de Chile, debe haber una revisión urgente al estado en que se encuentran y mejorarlo”, añadió.
Como cuarto aspecto, Berger señaló que como consecuencia del plan de garantías explícitas (AUGE), hay una serie de costos de atención de los consultorios que se han elevado, no así los aportes adicionales para su prestación. “entonces, es necesario revisar, establecer nuevos compromisos y metodologías para que podamos efectivamente garantizar una atención, y que además esta sea de calidad”.
Finalmente, el jefe comunal señaló que la aplicación del modelo de salud familiar ha introducido en la práctica que los proyectos de infraestructura en salud dependiente de los municipios se encarezcan, y que surjan cotidianamente nuevas exigencias especializadas que, para poder concretarse, son cubiertas finalmente por las administraciones comunales.
“Creemos que es absolutamente salvable un tema de este tipo. La vía por ejemplo de los convenios complementarios o compromisos explícitos para cubrir los diferenciales desde el Estado, pueden ayudar a que esto no sea un inconveniente en el futuro”, sostuvo.
El timonel valdiviano fue invitado en calidad de panelista exponer la visión del municipalismo respecto al estado de la salud dependiente de las municipalidades, en el último congreso de alcaldes y concejales realizado en la ciudad nortina.
La experiencia local, tanto en las formas de mejorar la calidad de la atención como en la aplicación del modelo de salud familiar –la comuna fue una de las primeras en Chile en adaptar este sistema– fueron los elementos para invitar al edil valdiviano como expositor en el tema.
“Existen al menos cinco puntos que preocupan a los municipios en materia de salud, y que requieren sentarse a una mesa a conversar, todos los actores involucrados en la toma de decisión, esto es, el ministerio de Salud, la Confederación de Trabajadores de la Salud (CONFUSAM) y por su puesto los municipios, quien somos los que administramos el sistema”, sostuvo Berger.
El edil explicó que encabeza la lista de puntos, la urgencia de corregir y aumentar el aporte per cápita por usuario atendido , y que hoy alcanza a apenas 2 mil 130 pesos mensuales.
“Esta cifra no alcanza siquiera para un set de aspirinas. Los estudios de la propia Asociación Chilena de municipios indican que al menos debiera elevarse a 3 mil pesos, y los que realizó la Universidad Católica hablan de un piso mínimo de 3 mil 700 pesos”, indicó.
Junto con el aumento del per cápita, la segunda demanda apuntar a corregir los factores a través de los cuales se calcula este aporte.
También forman parte de la lista de temas la revisión de los aportes que se entregan a las comunas de “costo fijo”, que son aquellas de baja población y que no alcanzan con el per cápita a cubrir los requerimientos mínimos de atención. Por ello, reciben una suma fija de recursos, independiente del número de usuarios que registre.
“El problema que el costo fijo es antiguo, no se ha actualizado ni considera una serie de nuevas exigencias y prestaciones que los consultorios deben hacer. Como hablamos aquí a la par de las comunas más pobres de Chile, debe haber una revisión urgente al estado en que se encuentran y mejorarlo”, añadió.
Como cuarto aspecto, Berger señaló que como consecuencia del plan de garantías explícitas (AUGE), hay una serie de costos de atención de los consultorios que se han elevado, no así los aportes adicionales para su prestación. “entonces, es necesario revisar, establecer nuevos compromisos y metodologías para que podamos efectivamente garantizar una atención, y que además esta sea de calidad”.
Finalmente, el jefe comunal señaló que la aplicación del modelo de salud familiar ha introducido en la práctica que los proyectos de infraestructura en salud dependiente de los municipios se encarezcan, y que surjan cotidianamente nuevas exigencias especializadas que, para poder concretarse, son cubiertas finalmente por las administraciones comunales.
“Creemos que es absolutamente salvable un tema de este tipo. La vía por ejemplo de los convenios complementarios o compromisos explícitos para cubrir los diferenciales desde el Estado, pueden ayudar a que esto no sea un inconveniente en el futuro”, sostuvo.
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