25 millones de pesos estima invertir municipio de La Serena en obras de demolición de calle Domeyko
La Municipalidad de La Serena deberá invertir 25 millones de pesos en las obras de demolición de calle Domeyko, informó el Alcalde Raúl Saldívar. Actualmente y como paso previo, se lleva a cabo la desratización del sector que destruyó el incendio acaecido en enero de este año.
Se trata de una medida fundamental a la hora de planificar demoliciones, sobre todo cuando se trata de estructuras antiguas como las de Domeyko, las que además se ubican en pleno centro de La Serena, situación que podría acarrear una situación sanitaria de riesgo.
El edil afirmó que el municipio financiará son recursos propios las obras de demolición, aunque “sin perder la esperanza” de conseguir auxilio económico de la Oficina de Emergencia del Ministerio del Interior, organismo que se había comprometido a entregar recursos para el derribamiento de las estructuras dañadas. Sin embargo, el compromiso se hizo antes del ajuste presupuestario determinado por el Gobierno, por lo cual existe incertidumbre respecto a la materialización del aporte.
“El municipio ha determinado por sus propios medios iniciar el proceso de demolición del sector y posteriormente el cierro, debido a que no hemos contado con los recursos necesarios que se esperaban por la vía de Emergencia y con la que se podría abordar esto con una solución de mucha mejor calidad que la que haríamos nosotros”, dijo el edil.
En cuanto al proceso de demoler, éste guarda cierta complejidad y por lo mismo, consta de algunos pasos que son necesarios y perentorios. La desratización, es el primero de ellos y se estima en 10 días su desarrollo. Paralelamente, se recopilan los antecedentes que dicen relación en cómo abordar la demolición, en un sector donde todavía existen muros con un alto sector de peligrosidad, y mucho material dispuesto por el suelo.
Hecha la demolición, los volúmenes de material que se obtengan deberán ser retirados por el municipio y depositados en un sitio autorizado. Una vez limpio el sector, el municipio cerrará el perímetro con el fin de impedir el acceso , evitando así una eventual situación de inseguridad.
“La idea es hacer esto lo más rápido, expedito y eficaz posible”, insistió el edil.
Pasado la etapa de cierre, el municipio iniciará las conversaciones con los propietarios para definir eventuales proyectos para el sector o bien una solución urbana satisfactoria que permita recuperar lo que alguna vez fue una de las calles más tradicionales de la zona histórica serenense.
Se trata de una medida fundamental a la hora de planificar demoliciones, sobre todo cuando se trata de estructuras antiguas como las de Domeyko, las que además se ubican en pleno centro de La Serena, situación que podría acarrear una situación sanitaria de riesgo.
El edil afirmó que el municipio financiará son recursos propios las obras de demolición, aunque “sin perder la esperanza” de conseguir auxilio económico de la Oficina de Emergencia del Ministerio del Interior, organismo que se había comprometido a entregar recursos para el derribamiento de las estructuras dañadas. Sin embargo, el compromiso se hizo antes del ajuste presupuestario determinado por el Gobierno, por lo cual existe incertidumbre respecto a la materialización del aporte.
“El municipio ha determinado por sus propios medios iniciar el proceso de demolición del sector y posteriormente el cierro, debido a que no hemos contado con los recursos necesarios que se esperaban por la vía de Emergencia y con la que se podría abordar esto con una solución de mucha mejor calidad que la que haríamos nosotros”, dijo el edil.
En cuanto al proceso de demoler, éste guarda cierta complejidad y por lo mismo, consta de algunos pasos que son necesarios y perentorios. La desratización, es el primero de ellos y se estima en 10 días su desarrollo. Paralelamente, se recopilan los antecedentes que dicen relación en cómo abordar la demolición, en un sector donde todavía existen muros con un alto sector de peligrosidad, y mucho material dispuesto por el suelo.
Hecha la demolición, los volúmenes de material que se obtengan deberán ser retirados por el municipio y depositados en un sitio autorizado. Una vez limpio el sector, el municipio cerrará el perímetro con el fin de impedir el acceso , evitando así una eventual situación de inseguridad.
“La idea es hacer esto lo más rápido, expedito y eficaz posible”, insistió el edil.
Pasado la etapa de cierre, el municipio iniciará las conversaciones con los propietarios para definir eventuales proyectos para el sector o bien una solución urbana satisfactoria que permita recuperar lo que alguna vez fue una de las calles más tradicionales de la zona histórica serenense.
Comentarios