Repudio a graffiti en el Corcovado.Los cariocas se manifestaron indignados por el ataque contra el monumento que es un símbolo de la ciudad

Ni siquiera “o jeito carioca de ser”, esa forma de ser amigable que tienen los habitantes de Rio de Janeiro, pudo amortiguar la reacción unánime de completo y total repudio contra las pintadas de graffitis que fue realizada sobre los brazos, la cara y el pecho de la estatua del Cristo Redentor, una de las siete maravillas del mundo moderno.

Fue la primera vez en casi 80 años, desde que la estatua fue inaugurada sobre el Cerro El Corcovado, que la estatua del Cristo es vandalizada, ya que solamente existía un antecedente, en 1991, cuando hubo pintadas en la base de la estatua.

Las pintadas negras en la cara y manos de la estatua incluían frases del tipo "Cuando los gatos no están, los ratones bailan", explicó Sergio Braga, vocero de la municipalidad de Río. Los vándalos aprovecharon los andamios que están colocados alrededor de la estatua del Cristo del Corcovado, para llegar a la parte alta.

Las pintadas fueron inicialmente cubiertas, pero se iniciará un proceso para borrarlas completamente, mientras las fuerzas del orden se abocan a capturar a los responsables, quienes son considerados como criminales, tal como los definió el alcalde de la ciudad, Eduardo Paes. Incluso se ofrecía una recompensa por cualquier información útil que llevara a la captura de los vándalos.

El alcalde Paes consideró el ataque como “de lesa-patria”, tras descubrir él mismo las pintadas cuando sobrevolaba en helicóptero el Parque Nacional de Tijuca, para observar los daños de las lluvias, junto a la ministra estatal de medio ambiente Izabella Teixeira.

Precisamente, la crítica situación humanitaria que vive la ciudad, aumentó la indignación del alcalde y de los cariocas en general. Eduardo Paes aseguró: “vamos a descubrir a los responsables por el ataque. Es inaceptable que en un momento como el que está pasando la ciudad, alguien piense en hacer una cosa de estas”.

Según las explicaciones dadas por la empresa de seguridad responsable por cuidar los accesos a la estatua, después de que fueran colocados los andamios, las fuertes tormentas de principios de abril dejaron fuera de operación las cámaras de seguridad y los vándalos aprovecharon un cambio de guardia para subir.

El monumento está en restauración, un proyecto que tendrá un costo de unos 4 millones de dólares, y aún permanecerá rodeado por andamios por otros seis meses. En la actualidad, el acceso está cerrado al público debido a los aludes que cerraron los caminos de acceso y también bloquearon las vías del tren que lleva hasta la estatua.

La estatua del Cristo Redentor, es el punto más famoso de Río de Janeiro y su imagen identifica a Brasil en todo el mundo.

El atentado contra el Cristo del Corcovado fue una acción de quienes en Brasil son conocidos como “pichadores”, un tipo de graffiteros que pintan en negro firmas con caligrafías. Entre las frases escritas, también había una reclamando por la desaparición de la ingeniera Patrícia Franco en 2008: "donde está la ingeniera Patricia?", decía la cita.

El caso involucra a cuatro policías acusados de haber matado a la joven a tiros por error y ocultar el cuerpo. Sin embargo el padre de ingeniera desaparecida, Antonio Celso Franco, rechazó la pinta indignado y dijo que “eso no es protesta, es acto de vandalismo”.

Un grupo de peritos de la Policía Federal estuvo en el Cristo para intentar descubrir pistas que permitan identificar a los autores.

El monumento del Cristo Rendentor que recibe 1 millón de visitantes cada año, tiene 38 metros de altura, y está ubicado en el cerro del Corcovado y dentro de la reserva ambiental del Parque de Tijuca.


fuente: http://www1.voanews.com