Colombia - Amazonía colombiana, sin cifras que permitan trazar con certeza su rumbo
Colombia - Amazonía colombiana, sin cifras que permitan trazar con certeza su rumbo
27 – 10 – 10
El 4 de noviembre el país conocerá los retos, las oportunidades y las amenazas a la calidad de vida y la sostenibilidad de la Amazonía colombiana. Amazonas 2030 hará una propuesta de cómo evaluar la gestión pública y privada para esta importante zona y presentará la primera encuesta nacional de percepción ciudadana que se hace sobre el Amazonas.
Bogotá. El 42 por ciento del territorio continental colombiano (483.119 km2) lo constituye la Amazonía. A pesar de su amplia extensión y lo que puede representar para la sostenibilidad del país y del planeta, el Gobierno y los ciudadanos disponen de poca información actualizada sobre esta zona colombiana.
En términos ambientales, por ejemplo, no existen mediciones periódicas de deforestación para la Amazonía. La información más reciente se encuentra en un informe del IDEAM del año 2007, que se basa en datos estimativos.
A nivel social, no se cuenta con información precisa sobre la población, especialmente aquella que habita en las zonas rurales (57 por ciento) porque los censos tienen altos índices de omisión (hasta del 100 por ciento) y solamente se cuentan los partos realizados en alguna institución prestadora de salud. A eso se agrega que no se registra la pertenencia étnica de los recién nacidos.
En términos de educación intercultural, las exigencias e indicadores que se aplican desde el Ministerio de Educación Nacional son convencionales, en muchos casos no responden a los contextos locales. Por ejemplo, los sistemas de evaluación o los calendarios escolares son aplicables en las zonas urbanas, pero no en las rurales donde los niños y las niñas deben acompañar a sus padres en algunas tareas domésticas, en la realización de rituales o en actividades de agricultura para la subsistencia.
“La información oficial sobre la Amazonía es escasa y la poca existente no es pertinente para los contextos rurales en donde habita el 57 por ciento de la población de esta zona del país”, explica Natalia Hernández, coordinadora de Amazonas 2030.
Afortunadamente, la Amazonía colombiana está en un buen estado de conservación gracias a que cuenta con 17 de las 56 áreas protegidas nacionales (Sistema Nacional de Áreas Protegidas), 185 resguardos indígenas y la Reserva Forestal de la Amazonía que cubren el 81 por ciento de la región (390.304 km2).
Proponen una nueva visión de desarrollo para el Amazonas
Amazonas 2030 es la alianza entre organizaciones de la sociedad civil, empresa privada y medios de comunicación que busca promover la calidad de vida y la sostenibilidad de los ecosistemas y los habitantes amazónicos con una visión de desarrollo socioambiental adecuado a las particularidades de la región y a su diversidad cultural y biológica.
En ese sentido, la alianza propondrá al país una serie de indicadores novedosos para medir y monitorear la conservación de la selva, la diversidad cultural existente y la calidad de vida de los habitantes, entre otros temas.
“Si se utilizan solamente los indicadores convencionales con una visión andina que miden la calidad de vida en términos de ingresos económicos o de los materiales usados en las viviendas, por ejemplo, se promovería la aculturación de los pueblos indígenas y su migración a las ciudades porque en las zonas rurales sigue vigente la economía de subsistencia y la construcción de casas con materiales de la región. Por el contrario, si se construyen o generan indicadores para medir la calidad de vida de esas poblaciones rurales en términos de acceso a los alimentos de manera gratuita o a los materiales de construcción de la región, posiblemente se fortalecerán sus conocimientos, prácticas y tecnologías tradicionales”, agrega Hernández.
El 4 de noviembre en el Museo Nacional de Bogotá, de 8 a 10:30 del día, Amazonas 2030 mostrará al país los retos, las oportunidades y las amenazas a la calidad de vida y la sostenibilidad de la Amazonía colombiana. Dicha información estará enmarcada en las cuatro dimensiones de la sostenibilidad: sociocultural, ambiental, económica e institucional.
Los datos serán comparados con la ‘Primera encuesta de percepción ciudadana sobre la Amazonía colombiana’, para la cual fueron entrevistados indígenas y ciudadanos en general sobre las acciones que se deben realizar en esta zona y los conocimientos que tienen sobre ella.
La encuesta, entre otros aspectos, mostró que para los ciudadanos es claro que la selva amazónica mitiga los efectos del cambio climático por su riqueza hídrica, de flora y fauna que le permiten oxigenar y equilibrar al planeta. De no cumplir con esta función su salud se verá afectada y estará en riesgo la supervivencia de la Tierra. Por ello piden que el Gobierno y ellos mismos se preocupen más por conservarla y preservarla.
La encuesta fue realizada por Ipsos – Napoleón Franco a comienzos de este año, sus resultados serán comparados con la información disponible y no disponible sobre la Amazonía para lograr una adecuada formulación de políticas y toma de decisiones.
Los aliados de Amazonas 2030 son ALISOS (Alianzas para la Sostenibilidad), la Fundación Gaia Amazonas, la Fundación Etnollano, Publicaciones Semana y el Consejo Empresarial Colombiano para el Desarrollo Sostenible (CECODES), quienes cuentan con el apoyo de AVINA y la Embajada de Holanda en Colombia.
fuente. Resumen de Prensa de PNUMA
27 – 10 – 10
El 4 de noviembre el país conocerá los retos, las oportunidades y las amenazas a la calidad de vida y la sostenibilidad de la Amazonía colombiana. Amazonas 2030 hará una propuesta de cómo evaluar la gestión pública y privada para esta importante zona y presentará la primera encuesta nacional de percepción ciudadana que se hace sobre el Amazonas.
Bogotá. El 42 por ciento del territorio continental colombiano (483.119 km2) lo constituye la Amazonía. A pesar de su amplia extensión y lo que puede representar para la sostenibilidad del país y del planeta, el Gobierno y los ciudadanos disponen de poca información actualizada sobre esta zona colombiana.
En términos ambientales, por ejemplo, no existen mediciones periódicas de deforestación para la Amazonía. La información más reciente se encuentra en un informe del IDEAM del año 2007, que se basa en datos estimativos.
A nivel social, no se cuenta con información precisa sobre la población, especialmente aquella que habita en las zonas rurales (57 por ciento) porque los censos tienen altos índices de omisión (hasta del 100 por ciento) y solamente se cuentan los partos realizados en alguna institución prestadora de salud. A eso se agrega que no se registra la pertenencia étnica de los recién nacidos.
En términos de educación intercultural, las exigencias e indicadores que se aplican desde el Ministerio de Educación Nacional son convencionales, en muchos casos no responden a los contextos locales. Por ejemplo, los sistemas de evaluación o los calendarios escolares son aplicables en las zonas urbanas, pero no en las rurales donde los niños y las niñas deben acompañar a sus padres en algunas tareas domésticas, en la realización de rituales o en actividades de agricultura para la subsistencia.
“La información oficial sobre la Amazonía es escasa y la poca existente no es pertinente para los contextos rurales en donde habita el 57 por ciento de la población de esta zona del país”, explica Natalia Hernández, coordinadora de Amazonas 2030.
Afortunadamente, la Amazonía colombiana está en un buen estado de conservación gracias a que cuenta con 17 de las 56 áreas protegidas nacionales (Sistema Nacional de Áreas Protegidas), 185 resguardos indígenas y la Reserva Forestal de la Amazonía que cubren el 81 por ciento de la región (390.304 km2).
Proponen una nueva visión de desarrollo para el Amazonas
Amazonas 2030 es la alianza entre organizaciones de la sociedad civil, empresa privada y medios de comunicación que busca promover la calidad de vida y la sostenibilidad de los ecosistemas y los habitantes amazónicos con una visión de desarrollo socioambiental adecuado a las particularidades de la región y a su diversidad cultural y biológica.
En ese sentido, la alianza propondrá al país una serie de indicadores novedosos para medir y monitorear la conservación de la selva, la diversidad cultural existente y la calidad de vida de los habitantes, entre otros temas.
“Si se utilizan solamente los indicadores convencionales con una visión andina que miden la calidad de vida en términos de ingresos económicos o de los materiales usados en las viviendas, por ejemplo, se promovería la aculturación de los pueblos indígenas y su migración a las ciudades porque en las zonas rurales sigue vigente la economía de subsistencia y la construcción de casas con materiales de la región. Por el contrario, si se construyen o generan indicadores para medir la calidad de vida de esas poblaciones rurales en términos de acceso a los alimentos de manera gratuita o a los materiales de construcción de la región, posiblemente se fortalecerán sus conocimientos, prácticas y tecnologías tradicionales”, agrega Hernández.
El 4 de noviembre en el Museo Nacional de Bogotá, de 8 a 10:30 del día, Amazonas 2030 mostrará al país los retos, las oportunidades y las amenazas a la calidad de vida y la sostenibilidad de la Amazonía colombiana. Dicha información estará enmarcada en las cuatro dimensiones de la sostenibilidad: sociocultural, ambiental, económica e institucional.
Los datos serán comparados con la ‘Primera encuesta de percepción ciudadana sobre la Amazonía colombiana’, para la cual fueron entrevistados indígenas y ciudadanos en general sobre las acciones que se deben realizar en esta zona y los conocimientos que tienen sobre ella.
La encuesta, entre otros aspectos, mostró que para los ciudadanos es claro que la selva amazónica mitiga los efectos del cambio climático por su riqueza hídrica, de flora y fauna que le permiten oxigenar y equilibrar al planeta. De no cumplir con esta función su salud se verá afectada y estará en riesgo la supervivencia de la Tierra. Por ello piden que el Gobierno y ellos mismos se preocupen más por conservarla y preservarla.
La encuesta fue realizada por Ipsos – Napoleón Franco a comienzos de este año, sus resultados serán comparados con la información disponible y no disponible sobre la Amazonía para lograr una adecuada formulación de políticas y toma de decisiones.
Los aliados de Amazonas 2030 son ALISOS (Alianzas para la Sostenibilidad), la Fundación Gaia Amazonas, la Fundación Etnollano, Publicaciones Semana y el Consejo Empresarial Colombiano para el Desarrollo Sostenible (CECODES), quienes cuentan con el apoyo de AVINA y la Embajada de Holanda en Colombia.
fuente. Resumen de Prensa de PNUMA
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