José Luis Cienfuegos: «El cine de Portabella es libre y diferente»
Pere Portabella había prometido asistir a la presentación de su última película «El silencio antes de Bach», en un acto organizado por el Ayuntamiento de Langreo y la asociación cultural Cauce. Pero el rodaje de parte de su nuevo proyecto en Berlín se lo impidió. No obstante, pidió que presentara la película José Luis Cienfuegos, director del Festival de Cine de Gijón. Comenzó su charla utilizando una frase de Portabella -«el cine es un arte joven que ya se ha hecho viejo»-, para recordar que hay un deterioro en el tratamiento de cine de autor y que cada vez se abre más el abismo entre ese cine y el comercial. «Hemos estado atados al cine narrativo, académico que heredamos de Hollywood, con una vuelta al cine primitivo, centrado en las atracciones». Por eso, ahora, al espectador inmovilizado en la butaca sólo le sirven las carreras, los golpes, lo que termina pareciendo un verdadero circo.
Sin embargo, insistió en que hay otro cine libre y diferente que se libera del cine de contar historias. Y ese cine es el que hace Portabella, un director catalán que proviene de una familia burguesa y que se trasladó a Madrid a estudiar Químicas. Pero el cine lo atraía más y fundó «Films 59» que produjo «Los Golfos» de Carlos Saura, «El cochecito» y «Viridiana» de Luis Buñuel con la que obtuvo la «Palma de Oro» en el Festival de Cannes. Dejó de producir películas y volvió a casa, sirviendo de catalizador a la Escuela de Barcelona. Cienfuegos comentó que el director buscó la colaboración de personas que estuvieran distanciadas y no contaminadas por el mundo del cine. Por eso recordó una frase de Portabella: «no necesito un guionista de cine, sino amigos», como lo fueron el músico Carles Santos o el artista Joan Brossa.
En su intervención destacó que el director fue uno de los pioneros en romper la barrera entre el cine y los museos. Por eso sus obras se han visto en el MOMA de Nueva York o en la Documenta de Kassel. Terminó su presentación con un comentario sobre «El silencio antes de Bach» que recibió el premio especial del jurado en la pasada edición del Festival de Cine de Gijón. Se trata de una película «construida a base de asociaciones rítmicas, en la que cada plano se une al siguiente de manera cadenciosa». Tan cadenciosa y personal que resulta imposible explicar de que va. «Lo mejor de la película es que cada persona construye su propio puzzle».
fuente: www.lne.es
Sin embargo, insistió en que hay otro cine libre y diferente que se libera del cine de contar historias. Y ese cine es el que hace Portabella, un director catalán que proviene de una familia burguesa y que se trasladó a Madrid a estudiar Químicas. Pero el cine lo atraía más y fundó «Films 59» que produjo «Los Golfos» de Carlos Saura, «El cochecito» y «Viridiana» de Luis Buñuel con la que obtuvo la «Palma de Oro» en el Festival de Cannes. Dejó de producir películas y volvió a casa, sirviendo de catalizador a la Escuela de Barcelona. Cienfuegos comentó que el director buscó la colaboración de personas que estuvieran distanciadas y no contaminadas por el mundo del cine. Por eso recordó una frase de Portabella: «no necesito un guionista de cine, sino amigos», como lo fueron el músico Carles Santos o el artista Joan Brossa.
En su intervención destacó que el director fue uno de los pioneros en romper la barrera entre el cine y los museos. Por eso sus obras se han visto en el MOMA de Nueva York o en la Documenta de Kassel. Terminó su presentación con un comentario sobre «El silencio antes de Bach» que recibió el premio especial del jurado en la pasada edición del Festival de Cine de Gijón. Se trata de una película «construida a base de asociaciones rítmicas, en la que cada plano se une al siguiente de manera cadenciosa». Tan cadenciosa y personal que resulta imposible explicar de que va. «Lo mejor de la película es que cada persona construye su propio puzzle».
fuente: www.lne.es
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