Presentan un sistema para evitar fraudes en el vino

Una empresa española de matriz suiza especializada en sistemas de seguridad para billetes de curso legal y otro tipo de documentos ha presentado un sistema para proteger el vino de posibles fraudes o manipulaciones.

La empresa SICPA Spain ha presentado su Centro Técnico Operativo (CTO), que tiene por finalidad proteger al vino ante posibles fraudes o manipulaciones, y mejorar la trazabilidad de este producto, que en Castilla-La Mancha acapara el 50 por ciento de la producción nacional.

El consejero delegado de SICPA Spain, Mariano Rubio, ha explicado que las falsificaciones de vinos de marca en países como China, que alcanzan hasta el 70 por ciento de las ventas de productos de importación y las nuevas normas comunitarias de contraetiquetas, han llevado a la multinacional suiza a entrar en un sector que demanda medidas de seguridad y autentificación del vino embotellado.
Las características del CTO y los objetivos de la empresa han sido presentados hoy a tres bodegas de diferentes tamaños de la Denominación de Origen Valdepeñas como Félix Solís y Juan Antonio Mejía, ambas en Valdepeñas, y Fernando Castro, en Santa Cruz de Mudela.

El objetivo de esta presentación, según Rubio, ha sido conocer las necesidades del sector en aspectos relacionados con la seguridad y autentificación del vino.

En este contexto, Rubio ha insistido en que las empresas vitivinícolas españolas tienen la obligación de defender la originalidad del producto y poner barreras a las falsificaciones que les perjudican económicamente y dañan su imagen.

La multinacional SICPA se dedica a la protección de billetes de banco en los cinco continentes, documentos de valor como pasaportes o billetes de lotería y productos de consumo como tarjetas de crédito, de la falsificación, duplicación y adulteración.

La empresa, a través de su CTO, incorporará a sus tradicionales medidas de seguridad un certificado de análisis sensorial complementado con un análisis físico-químico de las características del vino que se pueden identificar y servir de prueba, puesto que hay compuestos metálicos que son inmutables, ha explicado Rubio.

Este análisis contempla un número registrado en la contraetiqueta con el código de barras y por el que el consumidor podrá acceder a la información necesaria para conocer las características del vino, así como los elementos de seguridad que porta el sello de garantía para asegurar su identificación.

Este número está ligado a un código invisible encriptado entre la cápsula y el gollete de la botella, que se activa en el momento en el que el vino es embotellado.

A simple vista, en el sello se podrá apreciar una imagen de óptica variable similar a la que utilizan los billetes de banco para su identificación, ha indicado Rubio que ha agregado que este sistema se presentará oficialmente a nivel nacional en Madrid el próximo mes de febrero.
fuente: http://www.diariodigitalagrario.net

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