Industria del biodiesel en Argentina
Industria del biodiesel en Argentina
Desde 2006, la industria de biodiesel en el país creció 2250 por ciento, y el año pasado la Argentina trepó del quinto al cuarto puesto del ranking mundial de productores.
Martes, 18 de Enero de 2011
Los datos surgen del informe presentado por la Cámara Argentina de Energías Renovables (Cader) la semana última, el séptimo de una serie denominada "Estado de la industria".
"Creemos que para una industria pueda desarrollarse sanamente los ciudadanos tienen que tener la mayor cantidad posible de información y datos confiables, por eso publicamos periódicamente estudios acerca de las energías alternativas en la Argentina", dijo a La Nacion Carlos St. James, presidente de Cader.
El trabajo destaca que la Argentina ya es parte del "club de los millonarios", naciones productoras de más de un millón de toneladas por año y que hacia fines de 2011 habría una demanda de 3,25 millones de toneladas de biodiesel, lo cual excederá la oferta disponible, creando una necesidad de mayores inversiones en plantas.
Una radiografía de la industria local muestra que el sector está segmentado en tres clases: las "grandes aceiteras", tienen plantas con un tamaño promedio de 231.400 toneladas/año; los "grandes independientes", de 200.000 toneladas; y los "pequeños independientes" de 35.600 toneladas. Los dos primeros grupos (representados por nueve plantas productoras) tienen claras ventajas de escala, a las cuales se les puede agregar la proximidad a la materia prima y a puertos de embarcación. "Están perfectamente preparados para exportar", dice el informe.
En 2009, la Argentina mantuvo el quinto puesto mundial y la producción creció 31% (a un total de 1,2 millones de toneladas). La tendencia se consolidó y achicó la brecha con Alemania, principal productor mundial: mientras en 2008 la producción del país europeo era tres veces la nuestra, en 2009 fue solamente el doble.
La publicación indica que las exportaciones argentinas de biodiesel continúan firmes, a pesar de que se presenten períodos con movimientos erráticos. La Argentina exporta alrededor del 68% de lo que produce y el principal destino es Europa.
"La reciente caída en exportaciones puede adjudicarse al desarrollo y aumento del mercado interno nacional a un B7 (por resolución oficial el gasoil debe tener un 7% de biocombustible), y refleja que muchas de las pymes incorporadas al cupo nacional siguen con problemas de arranque de sus plantas, obligando a las grandes exportadoras a cubrir el mercado local con volúmenes adicionales a los comprometidos oportunamente. No obstante, se evidencia un repunte sostenido y progresivo de las exportaciones, principalmente por los valores internacionales actuales."
El papel de China
Más adelante se detalla que entre 2007 y 2009, más de la mitad del aceite de soja (materia prima para el 99% del biocombustible que se elabora en el país) exportado tenía como destino a China. "En el primer semestre de 2010, tanto el volumen como el porcentaje destinados a China fueron prácticamente nulos, así como para 2010 en su totalidad (con la excepción de una enorme venta de aceite en diciembre de 2010). Sin embargo, puede notarse también que ya existía una tendencia asiática de comprar menos aceite argentino, en función del desarrollo en ese país de su propia industria procesadora. Asimismo, los decrecientes volúmenes exportados pueden ser atribuidos en buena medida al desarrollo de la industria nacional de biodiesel, el cual se exporta principalmente a Europa con mayor valor agregado que el aceite (que a su vez tiene mayor valor agregado que simplemente exportar granos). Estos acontecimientos hablan de un desarrollo positivo para la agroindustria nacional en general."A modo de conclusión, se resume el estado de las diferentes zonas productoras en el mundo.
Europa. Los países del Viejo Continente tienen, en general, un exceso de capacidad instalada y falta de materia prima.
Estados Unidos. Presenta una industria excesivamente atomizada, caracterizada por plantas demasiado pequeñas, las cuales, sin subsidios importantes, no son rentables.
Australia. Le falta un marco regulatorio adecuado y el compromiso de sus legisladores de impulsar esta industria.
Malasia tiene una industria a base de una materia prima -la palma- que el mundo mira con recelo por tratarse de alimento.
Brasil. Requiere de precios muy altos para su biodiesel para contrarrestar la ineficiencia de su industria.
Finalmente, se sostiene: "Sólo hay dos mercados mundiales de biodiesel que han demostrado en los últimos años ser contundentemente exitosos: Francia y Argentina". La Nación
fuente: prochile
Desde 2006, la industria de biodiesel en el país creció 2250 por ciento, y el año pasado la Argentina trepó del quinto al cuarto puesto del ranking mundial de productores.
Martes, 18 de Enero de 2011
Los datos surgen del informe presentado por la Cámara Argentina de Energías Renovables (Cader) la semana última, el séptimo de una serie denominada "Estado de la industria".
"Creemos que para una industria pueda desarrollarse sanamente los ciudadanos tienen que tener la mayor cantidad posible de información y datos confiables, por eso publicamos periódicamente estudios acerca de las energías alternativas en la Argentina", dijo a La Nacion Carlos St. James, presidente de Cader.
El trabajo destaca que la Argentina ya es parte del "club de los millonarios", naciones productoras de más de un millón de toneladas por año y que hacia fines de 2011 habría una demanda de 3,25 millones de toneladas de biodiesel, lo cual excederá la oferta disponible, creando una necesidad de mayores inversiones en plantas.
Una radiografía de la industria local muestra que el sector está segmentado en tres clases: las "grandes aceiteras", tienen plantas con un tamaño promedio de 231.400 toneladas/año; los "grandes independientes", de 200.000 toneladas; y los "pequeños independientes" de 35.600 toneladas. Los dos primeros grupos (representados por nueve plantas productoras) tienen claras ventajas de escala, a las cuales se les puede agregar la proximidad a la materia prima y a puertos de embarcación. "Están perfectamente preparados para exportar", dice el informe.
En 2009, la Argentina mantuvo el quinto puesto mundial y la producción creció 31% (a un total de 1,2 millones de toneladas). La tendencia se consolidó y achicó la brecha con Alemania, principal productor mundial: mientras en 2008 la producción del país europeo era tres veces la nuestra, en 2009 fue solamente el doble.
La publicación indica que las exportaciones argentinas de biodiesel continúan firmes, a pesar de que se presenten períodos con movimientos erráticos. La Argentina exporta alrededor del 68% de lo que produce y el principal destino es Europa.
"La reciente caída en exportaciones puede adjudicarse al desarrollo y aumento del mercado interno nacional a un B7 (por resolución oficial el gasoil debe tener un 7% de biocombustible), y refleja que muchas de las pymes incorporadas al cupo nacional siguen con problemas de arranque de sus plantas, obligando a las grandes exportadoras a cubrir el mercado local con volúmenes adicionales a los comprometidos oportunamente. No obstante, se evidencia un repunte sostenido y progresivo de las exportaciones, principalmente por los valores internacionales actuales."
El papel de China
Más adelante se detalla que entre 2007 y 2009, más de la mitad del aceite de soja (materia prima para el 99% del biocombustible que se elabora en el país) exportado tenía como destino a China. "En el primer semestre de 2010, tanto el volumen como el porcentaje destinados a China fueron prácticamente nulos, así como para 2010 en su totalidad (con la excepción de una enorme venta de aceite en diciembre de 2010). Sin embargo, puede notarse también que ya existía una tendencia asiática de comprar menos aceite argentino, en función del desarrollo en ese país de su propia industria procesadora. Asimismo, los decrecientes volúmenes exportados pueden ser atribuidos en buena medida al desarrollo de la industria nacional de biodiesel, el cual se exporta principalmente a Europa con mayor valor agregado que el aceite (que a su vez tiene mayor valor agregado que simplemente exportar granos). Estos acontecimientos hablan de un desarrollo positivo para la agroindustria nacional en general."A modo de conclusión, se resume el estado de las diferentes zonas productoras en el mundo.
Europa. Los países del Viejo Continente tienen, en general, un exceso de capacidad instalada y falta de materia prima.
Estados Unidos. Presenta una industria excesivamente atomizada, caracterizada por plantas demasiado pequeñas, las cuales, sin subsidios importantes, no son rentables.
Australia. Le falta un marco regulatorio adecuado y el compromiso de sus legisladores de impulsar esta industria.
Malasia tiene una industria a base de una materia prima -la palma- que el mundo mira con recelo por tratarse de alimento.
Brasil. Requiere de precios muy altos para su biodiesel para contrarrestar la ineficiencia de su industria.
Finalmente, se sostiene: "Sólo hay dos mercados mundiales de biodiesel que han demostrado en los últimos años ser contundentemente exitosos: Francia y Argentina". La Nación
fuente: prochile
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