Partida del Ministerio de Educación pasó su prueba de fuego en la Cámara Alta
Tras más de seis horas de debate, el Senado repuso por 20 votos a favor, 14 en contra y 3 abstenciones la partida del Ministerio de Educación que alcanza a los $4.717.624.493.000 y que durante su tramitación en la Cámara de Diputados había quedado reducida a $1.000 en sus gastos variables.
La acalorada discusión estuvo cruzada por argumentos a favor y en contra de la demanda del Magisterio en orden a conseguir, en el marco del debate presupuestario, un acuerdo con el Ejecutivo por una solución al tema de la deuda histórica.
Precisamente, los dirigentes nacionales del Colegio de Profesores, así como los representantes de la organización ciudadana Educación 2020 siguieron desde las tribunas toda la jornada protagonizando algunas manifestaciones que motivaron la suspensión de la sesión tras concluir la votación de la respectiva partida.
Cabe señalar que, la posibilidad de confirmar el rechazo a los recursos del Ministerio de Educación era esgrimida como una herramienta de negociación para obligar al Gobierno a reconocer la existencia de esta deuda como "un derecho" y abrir así una conversación con el profesorado que se encuentra movilizado desde hace varios días.
Sin embargo, se impuso la tesis de que -si bien estas demandas son legítimas- forman parte de una solución integral para la educación pública en el país y no se justifica dejar sin financiamiento los programas de jardines infantiles, de salas cunas y otros que tienen gastos variables.
Los senadores Mariano Ruiz Esquide, Camilo Escalona, Eduardo Frei, Soledad Alvear, Evelyn Matthei, Hosaín Sabag, Andrés Chadwick, Guido Girardi, Ricardo Núñez, Nelson Avila, Carlos Bianchi y Jaime Gazmuri se mostraron partidarios de reponer los recursos para Educación y aprobar la partida.
Asimismo instaron a las autoridades a evaluar una salida al conflicto que considere elevar el desempeño docente tanto en los establecimientos públicos como en la formación que ofrecen las distintas carreras de Pedagogía. Además señalaron la necesidad de mejorar las pensiones de quines jubilaron con montos muy bajos.
En tanto, los senadores Alberto Espina, Jaime Orpis, Carlos Ominami, Andrés Allamand, Carlos Cantero, Alejandro Navarro, Antonio Horvath, Hernán Larraín, Roberto Muñoz Barra, Adolfo Zaldívar y Jaime Orpis optaron por rechazar la partida de Educación debido a que existe un compromiso del Ejecutivo suscrito en el Protocolo de la Ley de Presupuesto del año pasado el cual fue finalmente desconocido.
Asimismo refutaron los argumentos que señalaban que con el rechazo de esta partida quedaban sin financiamiento muchos programas esenciales para los niños y niñas del país. Recalcaron que el tema de fondo es que esta era una oportunidad para resolver un tema pendiente y generar una voluntad de acuerdo que- ni siquiera exigía soluciones en el corto plazo- sino una fórmula para abordar el problema.
A su turno, los senadores Juan Pablo Letelier y José García Ruminot consultaron sobre el alcance del rechazo a la partida de Educación en la Cámara de Diputados que redujo a $1.000 pesos los gastos variables y solicitaron las precisiones correspondientes a la Dirección de Presupuestos sobre las facultades del Ejecutivo para reponer estos recursos.
Al respecto, el Director de la Dipres, Alberto Arenas explicó que esta situación es similar a la ocurrida el año pasado con la partida del Ministerio de Transportes y si se confirmara el rechazo dichos "recursos irían a saldo final y no se usarían en las partidas rechazadas".
El Senado aprobó además una indicación que permitirá usar la infraestructura ociosa de establecimientos educacionales rurales de modo de darles otro tipo de usos y también una norma que obligará a la JUNAEB a informar sobe el funcionamiento de los Módulos Dentales en el marco del programa de salud oral.
ARGUMENTOS A FAVOR Y EN CONTRA
El senador Mariano Ruiz-Esquide aseguró que la deuda que alcanza a unos US$2 mil millones para unos 85 mil docentes no debe ser abordada "ni con demagogia ni con tozudez". "Ni el Gobierno debe tomar esto como un solo apoyo político ni los gremios deben ser conducidos con una lógica de guerra de quien está con ellos y quien no lo está".
A su turno, el senador Alberto Espina precisó que "éste no es un tema político sino moral". El nivel de la educación está muy por debajo de lo que debiera ser y "espero que se genere un gran acuerdo que involucre a todos los sectores políticos, a los profesores, estudiantes, paradocentes, apoderados y que nos permita tener en una década un nuevo modelo educacional".
El senador Jaime Orpis estimó que "aquí ha faltado mayor visión" porque "hay que centrarse en el tema de la calidad pero para poder dar ese paso, necesariamente hay que abordar los temas gremiales. Cualquier cambio fundamental tiene que ser con los profesores. Y, más temprano que tarde, habrá que asumirlo".
En tanto, el senador Camilo Escalona señaló que "nadie puede llegar al absurdo de rechazar todo el programa de becas para el 2010 o los programas de la Junta de Auxilio Escolar y Becas" porque "nos expondríamos a una situación social de tal deterioro, a una pérdida completa del prestigio no solamente del Congreso Nacional, sino que también del profesorado".
Coincidió con su par el senador Eduardo Frei quien se mostró partidario de "atender la situación de los profesores con mayor rezago previsional y que han estado recibiendo jubilaciones muy bajas". Por eso llamó a "cerrar este largo período de conflictos que, en los hechos, ha lesionado las posibilidades de mejoramiento de la educación pública".
El senador Carlos Ominami se mostró "dolido" por el maltrato a los profesores; la incomprensión del Gobierno y el doble discurso, ya que "por un lado, se dice a los maestros que son lo más importante y, por otro, no reciben el tratamiento correspondiente". Por eso aseguró que la única opción es rechazar esta partida para abrir paso a un acuerdo.
Por su parte, la senadora Soledad Alvear hizo un llamado al profesorado para "asumir el tema de la educación de calidad, porque de lo contrario, no vamos a ser capaces de dar un salto al desarrollo" y a los parlamentarios para "actuar en forma responsable y colocar la educación como una tarea de Estado".
La senadora Evelyn Matthei admitió que todos somos responsables de la calidad de la educación ya que "hemos tolerado que en ciertas universidades, ingresen a Pedagogía personas con 320 puntos en la PSU. A ellos los contratarán en algún establecimiento, el Colegio de Profesores se opondrá a que sean evaluados, irán aumentando su remuneración en forma automática cada 2 años y, si algún municipio responsable lo quiere echar por mal desempeño, los tribunales lo reintegrarán al cargo con una indemnización de $15 a $25 millones".
Por su parte, el senador Hosaín Sabag reseñó los avances que han tenido los maestros durante los últimos años porque "venían con un trato indigno, con contrato al año y con una remuneración que era menos de lo que ganaba una nana". Mostró además su inquietud porque "hoy no más del 40% de los alumnos están en la educación pública".
En tanto, el senador Andrés Chadwick pidió asumir los temas de futuro pero también los del pasado, porque la deuda histórica "es un derecho que se generó a través de una ley". Por ello, el Magisterio lo que ha pedido es "un esfuerzo para ver de qué manera se puede dar cumplimiento a ese derecho dentro de la realidad económica del Estado".
A su turno, el senador Hernán Larraín recalcó que aquí no se trata de dejar a los niños sin las becas de alimentación y otros beneficios ni tampoco está en debate la calidad de la educación. El tema es: "¿vamos a darles a los profesores un instrumento para que puedan exigir que se repare o no la deuda que se les debe o simplemente les vamos a dar la espalda?".
El senador Andrés Allamand instó a aprovechar esta oportunidad para dar un salto cualitativo y "englobar en una negociación conjunta lo que son algunos de los reclamos justos de los profesores con otros temas donde los profesores, en mi opinión, están en deuda, como por ejemplo, todo lo que es la evaluación".
El senador Carlos Cantero puntualizó que lo que se requiere "es una señal política" e instó a sus pares a actuar con "coherencia ética porque la deuda histórica existe, el daño previsional existe, y hay que responder de eso, pero lamentablemente el Gobierno se ha cerrado".
En la misma línea, el senador Alejandro Navarro lamentó que el Ejecutivo solo responda ante la presión y afirmó que "el tema de fondo es si el Gobierno dará o no una señal para el pago de la deuda histórica, porque siento que si no la paga ahora, terminará pagándola el 13 de diciembre".
COMPROMISOS ADQUIRIDOS
El senador Antonio Horvath recordó que el Protocolo que acompañó a la Ley de Presupuesto 2009 estableció una instancia de trabajo tripartita para solucionar este tema de la deuda histórica y después se desconoció su validez. Por lo tanto, "es difícil aprobar un presupuesto con estas carencias de tipo moral y político".
Por su lado, el senador Guido Girardi señaló que en otros países como Francia e Inglaterra "nadie se atrevería a tocar el modelo de la educación pública", sin embargo, "nosotros aprobamos una ley para fortalecer la educación subvencionada". No obstante, reconoció que rechazar la partida de Educación es "solo prolongar la agonía".
El senador Ricardo Núñez advirtió que con el actual sistema educacional "Chile va a estancarse en algún instante porque uno de los más graves problemas es que hemos sido impávidos frente al proceso de privatización. Si no enfrentamos este tema difícilmente podremos hacerlo con la deuda histórica".
En tanto, el senador Nelson Ávila aseguró que "frente al último presupuesto que presenta la Presidenta Bachelet y a un área tan sensible como la educación no me siento habilitado para negarle el voto". Añadió que "el test de apoyo a la educación pública se hizo con la Ley General de Educación (LGE) y allí voté en contra".
Por su parte, el senador Carlos Bianchi acusó una "frialdad robótica" de parte de la Ministra de Educación frente a los requerimientos del profesorado. Aún así expresó que "hay que anteponer lo más importante que es la educación pública de este país. La privada subvencionada es la que ha matado la verdadera educación pública. Los alumnos de los colegios municipales están despareciendo cada año en un 2%".
El senador Roberto Muñoz Barra precisó que "los gobiernos de la Concertación han hecho justicia con muchas deudas históricas y la deuda con la educación pública es un imperativo moral". Rechazó además la verdadera "demonización" a que ha sido sometido el movimiento de los profesores.
A su turno, el senador Jaime Gazmuri, aseveró que es efectivo que aquí hay una deuda histórica pero no afecta solo a los profesores sino a todos los trabajadores afectados a principios de los 80'. "Hay una deuda que no es jurídica sino social y habrá que discutirla con posterioridad".
Finalmente, el senador Adolfo Zaldivar manifestó que lo que está en juego es la definición de la calidad de nuestra sociedad porque "no cumplir una obligación en el plano privado es grave y quien no la cumple es un tramposo. Por eso a nivel público creo que también se deben cumplir los compromisos".
La acalorada discusión estuvo cruzada por argumentos a favor y en contra de la demanda del Magisterio en orden a conseguir, en el marco del debate presupuestario, un acuerdo con el Ejecutivo por una solución al tema de la deuda histórica.
Precisamente, los dirigentes nacionales del Colegio de Profesores, así como los representantes de la organización ciudadana Educación 2020 siguieron desde las tribunas toda la jornada protagonizando algunas manifestaciones que motivaron la suspensión de la sesión tras concluir la votación de la respectiva partida.
Cabe señalar que, la posibilidad de confirmar el rechazo a los recursos del Ministerio de Educación era esgrimida como una herramienta de negociación para obligar al Gobierno a reconocer la existencia de esta deuda como "un derecho" y abrir así una conversación con el profesorado que se encuentra movilizado desde hace varios días.
Sin embargo, se impuso la tesis de que -si bien estas demandas son legítimas- forman parte de una solución integral para la educación pública en el país y no se justifica dejar sin financiamiento los programas de jardines infantiles, de salas cunas y otros que tienen gastos variables.
Los senadores Mariano Ruiz Esquide, Camilo Escalona, Eduardo Frei, Soledad Alvear, Evelyn Matthei, Hosaín Sabag, Andrés Chadwick, Guido Girardi, Ricardo Núñez, Nelson Avila, Carlos Bianchi y Jaime Gazmuri se mostraron partidarios de reponer los recursos para Educación y aprobar la partida.
Asimismo instaron a las autoridades a evaluar una salida al conflicto que considere elevar el desempeño docente tanto en los establecimientos públicos como en la formación que ofrecen las distintas carreras de Pedagogía. Además señalaron la necesidad de mejorar las pensiones de quines jubilaron con montos muy bajos.
En tanto, los senadores Alberto Espina, Jaime Orpis, Carlos Ominami, Andrés Allamand, Carlos Cantero, Alejandro Navarro, Antonio Horvath, Hernán Larraín, Roberto Muñoz Barra, Adolfo Zaldívar y Jaime Orpis optaron por rechazar la partida de Educación debido a que existe un compromiso del Ejecutivo suscrito en el Protocolo de la Ley de Presupuesto del año pasado el cual fue finalmente desconocido.
Asimismo refutaron los argumentos que señalaban que con el rechazo de esta partida quedaban sin financiamiento muchos programas esenciales para los niños y niñas del país. Recalcaron que el tema de fondo es que esta era una oportunidad para resolver un tema pendiente y generar una voluntad de acuerdo que- ni siquiera exigía soluciones en el corto plazo- sino una fórmula para abordar el problema.
A su turno, los senadores Juan Pablo Letelier y José García Ruminot consultaron sobre el alcance del rechazo a la partida de Educación en la Cámara de Diputados que redujo a $1.000 pesos los gastos variables y solicitaron las precisiones correspondientes a la Dirección de Presupuestos sobre las facultades del Ejecutivo para reponer estos recursos.
Al respecto, el Director de la Dipres, Alberto Arenas explicó que esta situación es similar a la ocurrida el año pasado con la partida del Ministerio de Transportes y si se confirmara el rechazo dichos "recursos irían a saldo final y no se usarían en las partidas rechazadas".
El Senado aprobó además una indicación que permitirá usar la infraestructura ociosa de establecimientos educacionales rurales de modo de darles otro tipo de usos y también una norma que obligará a la JUNAEB a informar sobe el funcionamiento de los Módulos Dentales en el marco del programa de salud oral.
ARGUMENTOS A FAVOR Y EN CONTRA
El senador Mariano Ruiz-Esquide aseguró que la deuda que alcanza a unos US$2 mil millones para unos 85 mil docentes no debe ser abordada "ni con demagogia ni con tozudez". "Ni el Gobierno debe tomar esto como un solo apoyo político ni los gremios deben ser conducidos con una lógica de guerra de quien está con ellos y quien no lo está".
A su turno, el senador Alberto Espina precisó que "éste no es un tema político sino moral". El nivel de la educación está muy por debajo de lo que debiera ser y "espero que se genere un gran acuerdo que involucre a todos los sectores políticos, a los profesores, estudiantes, paradocentes, apoderados y que nos permita tener en una década un nuevo modelo educacional".
El senador Jaime Orpis estimó que "aquí ha faltado mayor visión" porque "hay que centrarse en el tema de la calidad pero para poder dar ese paso, necesariamente hay que abordar los temas gremiales. Cualquier cambio fundamental tiene que ser con los profesores. Y, más temprano que tarde, habrá que asumirlo".
En tanto, el senador Camilo Escalona señaló que "nadie puede llegar al absurdo de rechazar todo el programa de becas para el 2010 o los programas de la Junta de Auxilio Escolar y Becas" porque "nos expondríamos a una situación social de tal deterioro, a una pérdida completa del prestigio no solamente del Congreso Nacional, sino que también del profesorado".
Coincidió con su par el senador Eduardo Frei quien se mostró partidario de "atender la situación de los profesores con mayor rezago previsional y que han estado recibiendo jubilaciones muy bajas". Por eso llamó a "cerrar este largo período de conflictos que, en los hechos, ha lesionado las posibilidades de mejoramiento de la educación pública".
El senador Carlos Ominami se mostró "dolido" por el maltrato a los profesores; la incomprensión del Gobierno y el doble discurso, ya que "por un lado, se dice a los maestros que son lo más importante y, por otro, no reciben el tratamiento correspondiente". Por eso aseguró que la única opción es rechazar esta partida para abrir paso a un acuerdo.
Por su parte, la senadora Soledad Alvear hizo un llamado al profesorado para "asumir el tema de la educación de calidad, porque de lo contrario, no vamos a ser capaces de dar un salto al desarrollo" y a los parlamentarios para "actuar en forma responsable y colocar la educación como una tarea de Estado".
La senadora Evelyn Matthei admitió que todos somos responsables de la calidad de la educación ya que "hemos tolerado que en ciertas universidades, ingresen a Pedagogía personas con 320 puntos en la PSU. A ellos los contratarán en algún establecimiento, el Colegio de Profesores se opondrá a que sean evaluados, irán aumentando su remuneración en forma automática cada 2 años y, si algún municipio responsable lo quiere echar por mal desempeño, los tribunales lo reintegrarán al cargo con una indemnización de $15 a $25 millones".
Por su parte, el senador Hosaín Sabag reseñó los avances que han tenido los maestros durante los últimos años porque "venían con un trato indigno, con contrato al año y con una remuneración que era menos de lo que ganaba una nana". Mostró además su inquietud porque "hoy no más del 40% de los alumnos están en la educación pública".
En tanto, el senador Andrés Chadwick pidió asumir los temas de futuro pero también los del pasado, porque la deuda histórica "es un derecho que se generó a través de una ley". Por ello, el Magisterio lo que ha pedido es "un esfuerzo para ver de qué manera se puede dar cumplimiento a ese derecho dentro de la realidad económica del Estado".
A su turno, el senador Hernán Larraín recalcó que aquí no se trata de dejar a los niños sin las becas de alimentación y otros beneficios ni tampoco está en debate la calidad de la educación. El tema es: "¿vamos a darles a los profesores un instrumento para que puedan exigir que se repare o no la deuda que se les debe o simplemente les vamos a dar la espalda?".
El senador Andrés Allamand instó a aprovechar esta oportunidad para dar un salto cualitativo y "englobar en una negociación conjunta lo que son algunos de los reclamos justos de los profesores con otros temas donde los profesores, en mi opinión, están en deuda, como por ejemplo, todo lo que es la evaluación".
El senador Carlos Cantero puntualizó que lo que se requiere "es una señal política" e instó a sus pares a actuar con "coherencia ética porque la deuda histórica existe, el daño previsional existe, y hay que responder de eso, pero lamentablemente el Gobierno se ha cerrado".
En la misma línea, el senador Alejandro Navarro lamentó que el Ejecutivo solo responda ante la presión y afirmó que "el tema de fondo es si el Gobierno dará o no una señal para el pago de la deuda histórica, porque siento que si no la paga ahora, terminará pagándola el 13 de diciembre".
COMPROMISOS ADQUIRIDOS
El senador Antonio Horvath recordó que el Protocolo que acompañó a la Ley de Presupuesto 2009 estableció una instancia de trabajo tripartita para solucionar este tema de la deuda histórica y después se desconoció su validez. Por lo tanto, "es difícil aprobar un presupuesto con estas carencias de tipo moral y político".
Por su lado, el senador Guido Girardi señaló que en otros países como Francia e Inglaterra "nadie se atrevería a tocar el modelo de la educación pública", sin embargo, "nosotros aprobamos una ley para fortalecer la educación subvencionada". No obstante, reconoció que rechazar la partida de Educación es "solo prolongar la agonía".
El senador Ricardo Núñez advirtió que con el actual sistema educacional "Chile va a estancarse en algún instante porque uno de los más graves problemas es que hemos sido impávidos frente al proceso de privatización. Si no enfrentamos este tema difícilmente podremos hacerlo con la deuda histórica".
En tanto, el senador Nelson Ávila aseguró que "frente al último presupuesto que presenta la Presidenta Bachelet y a un área tan sensible como la educación no me siento habilitado para negarle el voto". Añadió que "el test de apoyo a la educación pública se hizo con la Ley General de Educación (LGE) y allí voté en contra".
Por su parte, el senador Carlos Bianchi acusó una "frialdad robótica" de parte de la Ministra de Educación frente a los requerimientos del profesorado. Aún así expresó que "hay que anteponer lo más importante que es la educación pública de este país. La privada subvencionada es la que ha matado la verdadera educación pública. Los alumnos de los colegios municipales están despareciendo cada año en un 2%".
El senador Roberto Muñoz Barra precisó que "los gobiernos de la Concertación han hecho justicia con muchas deudas históricas y la deuda con la educación pública es un imperativo moral". Rechazó además la verdadera "demonización" a que ha sido sometido el movimiento de los profesores.
A su turno, el senador Jaime Gazmuri, aseveró que es efectivo que aquí hay una deuda histórica pero no afecta solo a los profesores sino a todos los trabajadores afectados a principios de los 80'. "Hay una deuda que no es jurídica sino social y habrá que discutirla con posterioridad".
Finalmente, el senador Adolfo Zaldivar manifestó que lo que está en juego es la definición de la calidad de nuestra sociedad porque "no cumplir una obligación en el plano privado es grave y quien no la cumple es un tramposo. Por eso a nivel público creo que también se deben cumplir los compromisos".
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